Oculus: El espejo del mal (2015)

                        Ves lo que quiere que veas

                                        

Película de terror sobrenatural escrita, montada y dirigida por Mike Flanagan, basada en su cortometraje homónimo, donde los sustos venían a pares, protagonizada por Karen Gillan como una muchacha que está convencida de que un espejo de antigüedades es responsable de la muerte e infortunio que su familia ha sufrido. Estrenada en nuestro país hace cinco años, la producción de los estudios WWE, Relativity y Blumhouse en colaboración con Intrepid y Warner Bros, fue una grata sorpresa para el género, lo cual no es de extrañar cuando hablamos de algo que lleva el sello de la compañía de Jason Blum. Completan el reparto Brenton Thwaites, Katee Sackhoff, Rory Cochrane y Annalise Basso, con música de los hermanos Newton y fotografía de Michael Fimognari, habituales de Flanagan.

La película transcurre en dos épocas diferentes: el presente y 11 años antes. Las dos tramas son narradas en paralelo mediante escenas retrospectivas. En 2002, el ingeniero de software Alan Russell se muda a una nueva casa con su esposa Marie, su hijo de 10 años Tim y su hija de 12 Kaylie. Alan adquiere un espejo antiguo para decorar su despacho. Sin que lo sepan, el espejo induce a tener alucinaciones sobrenaturales. Marie se ve acosada por visiones de su propio cuerpo en descomposición, mientras que Alan es seducido por una mujer fantasmal llamada Marisol Chavez (Kate Siegel), quien tiene espejos en lugar de ojos. Conforme avanza el tiempo, los padres se vuelven psicóticos; Alan se aísla en su despacho y Marie se muestra más introvertida y paranoide.

                                                    

Todas las plantas en la casa se marchitan y el perro de la familia desaparece tras quedarse encerrado en el despacho con el espejo. Tras ver Kaylie a Alan con Marisol, se lo dice a su madre y ambos padres discuten. Una noche, Marie se vuelve loca e intenta matar a sus hijos, pero Alan la encierra. Cuando la familia se queda sin comida, los niños se percatan de que su padre está bajo la influencia del espejo, por lo que Kaylie va a pedir ayuda a su madre, hallándola encadenada a la pared y actuando como un animal. Kaylie y Tim tratan de acudir a sus vecinos para que les ayuden, pero estos dudan de sus historias. Cuando Kaylie intenta usar el teléfono, descubre que todas sus llamadas son respondidas por el mismo hombre.

Una noche, Alan desencadena a Marie y ambos padres atacan a los niños. La madre brevemente recupera el sentido sólo para ser abatida de un tiro por Alan. Los niños tratan de destruir el espejo, pero este los engaña haciéndoles creer que están golpeándolo cuando realmente están dándole a la pared. Alan también experimenta un momento de lucidez y se suicida obligando a Tim a que apriete el gatillo de la pistola y le dispare, provocando una pequeña grieta en la esquina del espejo durante el proceso. Antes de morir, pide a los niños que corran , pero Marisol y otras víctimas del espejo aparecen como fantasmas horribles. La policía llega y se lleva a Tim para custodiarlo y antes de que los hermanos se separen, prometen reunirse de adultos y destruir el espejo. Según Tim se va, ve los fantasmas de sus padres observándole desde la casa.

                                               

En 2013, Tim es dado de alta del hospital psiquiátrico, habiendo llegado a creer que no sucedieron los sucesos sobrenaturales involucrados en las muertes de sus padres. Kaylie ha pasado la mayoría de su edad adulta investigando la historia del espejo. Valiéndose de su puesto como empleada de una casa de subastas, obtiene acceso al mismo y lo transporta al hogar familiar, donde lo pone en un cuarto repleto de cámaras de vigilancia y un interruptor de emergencia, un ancla con peso puesto en el techo. Kaylie intenta destruir el espejo, pero primero quiere documentar sus poderes, demostrando la inocencia de Tim. Este intenta convencerla de su error y ambos hermanos discuten.

Cuando notan que las plantas de interior comienzan a marchitarse, comprueban el metraje de la cámara y se ven ellos mismos haciendo cosas que no recuerdan. Tim finalmente acepta el poder sobrenatural del espejo e intenta escapar de la casa con Kaylie, sólo para que ambos se vean arrastrados de vuelta por la influencia de este. Viendo una alucinación de su madre, Kaylie la apuñala en el cuello, sólo para percatarse de que se lo ha hecho a Michael Dumont (James Lafferty), su prometido que había venido a verla. Tratan de llamar a la policía, pero sólo dan con la misma voz que les habló por teléfono de niños. En este punto ven a sus dobles fantasmales dentro de la casa de pie frente al espejo.

Dándose cuenta de que su llamada a emergencias no se hace, vuelven a entrar en la casa, donde Kaylie y Tim comienzan a alucinar viendo a las versiones infantiles de ambos, quedando separados y cada uno reviviendo la pesadilla de su juventud. Tim se despierta solo en el cuarto con el espejo, mientras simultáneamente una joven Kaylie alucina con su madre haciéndole señas desde el otro lado. Tim activa el interruptor de emergencia, dándose cuenta demasiado tarde y no pudiendo ver que Kaylie se ha detenido en su camino y que la ha matado. La policía llega y lo arresta, histérico como le pasó cuando era más joven, ya que tanto de niño como de adulto Tim afirmó que el espejo es el responsable.

Cuando se lo llevan ya en el presente ve el fantasma de Kaylie de pie en la casa con sus padres.

                                                 

En principio el director iba a hacer la película en plan metraje encontrado, con las escenas del pasado escritas en el guion en cursiva, inspirándose en HP Lovecraft sin ser una adaptación de su obra y rodada en Fairhope, Alabama. Como película de terror con rostros femeninos muy conocidos es un producto inteligente e ingenioso, ya que Oculus tiene un énfasis en el temor sobre la sangre y un final que deja la puerta bien abierta para secuelas, pudiendo ser solo el primer capítulo de una nueva franquicia emocionante para los aficionados al género más finos. Ambición, originalidad y sustos llevan adelante este filme reducido a un espejo que engaña a la vista.

Puntuación: 6,5