Agárralo como puedas (1989)

             De los archivos del escuadrón de policía


                             

              


Comedia dirigida por David Zucker y distribuida por Paramount, protagonizada por Leslie Nielsen como el inepto teniente de policía Frank Drebin, acompañado por Priscilla Presley, Ricardo Montalbán, George Kennedy y OJ Simpson como secundarios. La película presenta un tipo de humor acelerado basado en la comedia física, incluyendo muchas figuras retóricas o juegos de palabras visuales y verbales, así como otros chistes. También se basa en el personaje interpretado por Nielsen en la serie televisiva Escuadrón de policía, siendo una continuación de la misma que los creadores rescataron de la TV tras su fiasco, consiguiendo recibir su merecido con Agárralo como puedas.


El equipo creativo central detrás de Escuadrón de policía y de la saga cinematográfica incluía a Zucker, Jim Abrahams y Jerry Zucker, así como a Pat Proft en combinaciones diversas. La pura verdad es que tras Agárralo como puedas las tramas venían directamente de los archivos de este escuadrón de juego y de la cinta de espionaje Teléfono de Don Siegel, teniendo dos secuelas; 2 ½: El aroma del miedo y 33 1/3: El insulto final.


El teniente de la brigada de policía Frank Drebin, cogiéndose vacaciones en Beirut, interrumpe una conferencia de los mayores enemigos de EEUU: Idi Amin, Gadafi, Ruhollah Jomeiní, Yasir Arafat, Fidel Castro y Mijaíl Gorbachov (como puede apreciarse, años antes de The Interview ya se hacían películas sobre asesinar a líderes reales) que están tratando de concebir un plan terrorista para humillar al país norteamericano. En Los Ángeles, el agente Nordberg intenta estropear una operación de tráfico de drogas (heroína) en el muelle organizada por el dueño de la dársena, Vincent Ludwig, siendo disparado por sus secuaces. Tras regresar a LA y ser informado del caso por su jefe, el capitán Ed Hocken, Drebin visita a Nordberg en el hospital.


                                                      


Nordberg da pistas enigmáticas, incluyendo una foto del barco de Ludwig en el que se había organizado el trafico. Frank se reúne con el policía científico Ted Olsen (Ed Williams), quien ha inventado unos gemelos que disparan dardos tranquilizantes. Frank se entera por Ted que la chaqueta de Nordberg dio positivo por heroína. La brigada de policía es puesta al cargo de la seguridad con motivo de la visita de Isabel II del Reino Unido (Jeannette Charles) a Los Ángeles, y Ed le dice a Frank que tiene 24 horas para limpiar a Nordberg antes de que se haga correr la voz sobre lo que ha pasado y desmerezca la visita de la reina. Cuando Frank visita a Ludwig en su oficina, este se entera de que Nordberg aún está vivo.


Ludwig hace que su ayudante, Jane Spencer, colabore con Frank en su investigación, y los dos se enamoran. Sin embargo, Jane no sabe nada de las actividades ilegales de su superior. Después de que Frank salga de la oficina, Ludwig se reúne con Pahpshmir (Raye Birk), participante de la reunión de Beirut, para hablar de un complot de asesinato contra la reina. Ludwig acepta perpetrarlo por 20 millones de $, con Pahpshmir preguntándose como planea sacarlo adelante, explicando que al usar un mensáfono creará al asesino utilizando hipnosis. Ludwig intenta infructuosamente matar a Nordberg en el hospital; mientras el doctor hipnotizado huye de Frank, este accidentalmente acaba montando sobre un misil balístico hacia una tienda de pirotecnia, dejando el motivo del asesinato como desconocido.


Frank penetra en la oficina de Ludwig en su ausencia, buscando algún indicio y aunque halla una nota de Pahpshmir dirigida al antagonista que confirma sus sospechas, inicia sin querer un incendio que destruye la nota y la oficina. Luego tiene una discusión con uno de los hombres de Ludwig en su fábrica de un corral y luego se enfrenta a este con sus alegaciones en una recepción por la llegada de la reina. Frank malinterpreta la presentación que hace Ludwig de un mosquete a la monarca como un ataque y trata de protegerla, pero sólo causa más de un problema y es despedido de la brigada de policía. Después, Jane se entera de la trama y le dice a Frank que el plan será ejecutado en un partido de béisbol entre los Seattle Mariners y los California Angels en el estadio de los segundos en Anaheim durante un tramo de la séptima entrada y que uno de los jugadores lo llevará a cabo.


                                                      


La brigada de policía llega al estadio y para inspeccionar a los jugadores, Frank golpea al árbitro del plato con un bate de béisbol y le sustituye, cacheando a los jugadores para dar con armas mientras batean. El tramo de la séptima entrada comienza y Ludwig activa a su durmiente, el jugador local Reggie Jackson. Jane alerta a Frank, quien le persigue para abordarlo, pero Jackson logra escapar cuando la acción del teniente inicia una revuelta general entre los dos equipos. Ludwig mantiene a punta de pistola a Jane cuando empieza a abandonar el estadio mientras Jackson apunta a la reina. Frank trata de incapacitarlo con uno de sus dardos de los gemelos, pero falla y le da a una enorme mujer de la cubierta superior.


La mujer cae sobre la barandilla y aterriza sobre Jackson, incapacitándolo y salvando la vida de la reina. Frank sigue a Ludwig hasta lo alto del estadio y le dispara con el otro dardo del gemelo, provocando que caiga por el exterior en donde es golpeado por un autobús que pasa, atropellado por una apisonadora y pisoteado por la banda de marcha de la Universidad del Sur de California. Algunos de los miembros pisan sin querer el busca de Ludwig, impulsando a que Jane intente matar a Frank con la pistola del difunto, pero Drebin rompe el estado hipnotizado de la chica al declararle sinceramente lo que siente por ella dándole un anillo de compromiso. Ambos se reúnen con la alcaldesa Barkley (Nancy Marchand), quien reincorpora a Frank de regreso a la brigada de policía.


Además, un recuperado Nordberg le felicita hasta que Frank le empuja sin querer su silla de ruedas cuesta abajo por las escaleras del estadio lanzándole hasta el campo.


Agárralo como puedas dispara a base de bromas y risas, siendo una de las comedias más divertidas de siempre que se haya visto, a petar de chascarrillos que son muy bobalicones, sin arrepentimiento de resultar grosera y básicamente cachonda. Está ahí arriba codeándose con La vida de Brian, otra joya del humor.


Puntuación: 7,5


                                                   




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