Ases calientes (2007)

                           Las cartas están echadas

                                              

Comedia de acción escrita y dirigida por Joe Carnahan centrada en la persecución del mago de Las Vegas convertido en informante para la mafia Buddy Ases Israel (Jeremy Piven), a quien se le ha puesto una recompensa de un millón de dólares. El amplio elenco incluye a Ryan Reynolds, Ben Affleck, Common, Andy García, Alicia Keys, Taraji Henson, Ray Liotta y Chris Pine, todos ellos como los diferentes individuos que intentan o bien capturar o proteger a Israel. Ambientada en el lago Tahoe, tendría una precuela llamada Ases calientes 2: Baile de asesinos. La música es de Clint Mansell y es una producción de Studio Canal, Relativity y Working Title para Universal.

El mago de Las Vegas y aspirante a mafioso Buddy Ases Israel se oculta en un hotel del lago Tahoe con su séquito. Su agente, Morris Mecklen, habla sobre un potencial acuerdo de inmunidad con el subdirector del FBI Stanley Locke. Los agentes especiales Richard Messner y Donald Carruthers se enteran de que el enfermo jefe mafioso Primo Sparazza (Joseph Ruskin) ha emitido una recompensa por Israel valorada en un millón de dólares, y al implicar a un misterioso asesino conocido solamente como El Sueco (Vladimir Kulich), estipulan que llevará a Sparazza el corazón de Israel. Un número de asesinos también buscan la recompensa, incluyendo a Lazlo Soot (Tommy Flanagan), quien se especializa en disfraces e imitaciones; Sharice Watters y Georgia Sykes, dos matonas contratadas por el segundo de Sparazza; Pasquale Acosta (Néstor Carbonell), un experto en tortura tranquila y mercenario que fue cautivo del Servicio Aéreo Especial para evitar ser atrapado por la Interpol; y los psicóticos hermanos neonazis Tremor, Darwin, Jeeves (Kevin Durand) y Lester (Maury Sterling).

Locke envía a Messner y Carruthers para que lleven a Israel a custodia cuando se llega al acuerdo. Mientras, un equipo de prófugos fiadores, Jack Dupree y sus socios, Pistola Pete Deeks (Peter Berg) y Hollis Elmore (Martin Henderson), han sido contratados por la agencia que ha publicado la fianza de Israel para llevarlo a custodia. Los fiadores son atacados por los Tremor, y sólo Elmore escapa con vida. Messner es enviado a la escena del crimen mientras Carruthers va hacia Israel. Al mismo tiempo, cada uno de los asesinos accede al hotel por sus propios medios. Carruthers encuentra a Acosta, disfrazado de agente de seguridad, en un ascensor del hotel. Siente que algo va mal y ambos son mortalmente heridos en un tiroteo.

Mientras, Soot accede al ático haciéndose pasar por uno de los secuaces de Israel. Su segundo al mando, Don Ivy, se entera de que su jefe aceptó informarle como parte de la declaración de culpabilidad e intenta matarlo, pero Israel le hiere el tiempo suficiente para que el equipo de seguridad del hotel lo refrene. Georgia da con Carruthers y Acosta en el ascensor, pero asume que el segundo es Soot. En Los Ángeles, Locke se retira abruptamente del trato con Israel y ordena que a Messner y Carruthers no se les diga nada de ello. Los hermanos Tremor llegan al piso del ático, donde se enzarzan en un tiroteo con el equipo de seguridad y con Ivy, quien logra matar a Jeeves y Lester.

Israel, sabiendo cual es la nueva postura del FBI, intenta suicidarse. Messner llega al hotel y establece una posición alrededor del ascensor de Georgia. Sharice la cubre desde otro hotel con un rifle de francotirador calibre 50 Barrett M82, sobrepasando a los agentes del FBI. Acosta, aún vivo, dispara a Georgia, pero recibe un tiro de Carruthers. Sharice, pensando que su compañera está muerta, se niega a huir y sigue disparando al equipo del FBI. Georgia escapa al ático,donde detiene a Darwin Tremor antes de que mate a Ivy. Tremor huye y Messner, consternado por la muerte de Carruthers, frena a Ivy y Georgia en el hueco de la escalera, pero les deja huir.

Sharice, tras ver a ambos vivos y libres a través de la mira de su rifle, es acribillada por el FBI. Locke y un equipo de agentes bajan al ático y se llevan a Israel al hospital, mientras Soot escapa rompiendo su disfraz al vestirse como miembro de seguridad del hotel. Acosta, llevado en camilla, aparece también vivo y Darwin Tremor trata de escapar, es acribillado por Hollis Elmore. Messner llega al hospital y se entera de la verdad sobre los acontecimientos del día por parte de Locke. Se filtra que el misterioso Sueco es un famoso cardio cirujano y que Soot fue contratado por Sparazza para conseguir el corazón de Israel y que fuese trasplantado al cuerpo del capo, quien en realidad es Freeman Heller, agente federal encubierto y dado por muerto a manos de la mafia.

                               

La verdad es que el FBI intentó matar a Heller tras creer que su cometido había cruzado las líneas entre ser un mafioso o un agente federal. Sobrevivió y acabó siendo Sparazza todo el rato, aceptando exponer las operaciones criminales a cambio del corazón de Israel al ser este su hijo bastardo y donante más compatible. Messner, furioso por las muertes innecesarias, especialmente la de Carruthers, protesta y Locke le ordena que se marche del hospital y vuelva a casa, a Washington DC, ya que no está en el caso. Percatándose de que el FBI nunca admitirá lo que hicieron, entra en urgencias, cierra la puerta y desenchufa tanto a Israel como a Sparazza, matándolos a ambos y dejando su pistola y la placa en el suelo, dimitiendo aparentemente del FBI mientras Locke y sus hombres tratan desesperadamente de irrumpir.

                                                          

En este escenario del crimen digno del cine de Terrence Malick tenemos una violenta leonera de película llamada Ases calientes con algo del estilo de Tarantino pero no mucho de su humor o ingenio.

Puntuación: 6,5