Jóvenes ocultos (1989)

Duermen todo el día, se divierten toda la noche, no envejecen, nunca mueren... es divertido ser un vampiro


                                              



Terror adolescente con humor negro dirigido por Joel Schumacher, escrito por Jeffrey Boam y con un reparto formado por Corey Haim, Jason Patric, Kiefer Sutherland, Jami Gertz, Corey Feldman, Dianne Wiest, Alex Winter, Edward Herrmann, Jamison Newlander y Barnard Hughes. Su título original hace referencia a los niños perdidos creados por James Matthew Barrie para Peter Pan y sus aventuras en el país de Nunca Jamás, ya que como los vampiros, nunca crecen . Rodada en Santa Cruz, California, Warner Bros haría luego las secuelas Vampiros del surf y Sed de sangre . La música es de Thomas Newman.


Michael Emerson y su hermano menor Sam viajan con su recientemente divorciada madre Lucy al pequeño pueblo playero de Santa Carla, California, para vivir con su excéntrico padre, simplemente referido como Abuelo. Michael y Sam comienzan pasando el rato en la rambla, que está cubierta con panfletos de personas desaparecidas, mientras Lucy consigue un empleo en un videoclub atendido por el soltero local Max. Michael queda fascinado por Estrella, una joven que divisa en la rambla, aunque ella parece tener una relación con el misterioso David Powers, el líder de una joven pandilla de motoristas. En la tienda de cómics local, Sam conoce a los hermanos Edgar y Alan Frog, un par de auto proclamados caza vampiros que le dan cómics de terror para enseñarle sobre la amenaza que afirman que se ha infiltrado en el pueblo.


Michael finalmente habla con Estrella y se le acerca David, quien lo provoca para que los siga en moto junto a la playa hasta que lleguen a un peligroso acantilado por el que el protagonista casi se cae. En el garito de la banda, un hotel de lujo socavado bajo el acantilado, David inicia a Michael en el grupo. Estrella le desaconseja que no beba de una botella ofrecida, contándole que es sangre, pero Michael ignora su consejo. Después, David y los otros, incluido Michael, van a un puente de ferrocarril donde se cuelgan del borde sobre un desfiladero neblinoso; uno a uno caen hasta que sólo queda por hacerlo Michael, quien se despierta en casa al día siguiente, ignorando como llegó allí.


Sus ojos son sensibles a la luz solar y también desarrolla una súbita sed de sangre que lo lleva a atacar impulsivamente a Sam. El perro de este, Nanook, contraataca , haciendo que Sam se dé cuenta que Michael se está convirtiendo en un vampiro al ver el reflejo casi transparente de su hermano. Sam al principio está aterrado pero Michael le convence de que aún no es un vampiro y que desesperadamente necesita su ayuda. Michael comienza a desarrollar poderes sobrenaturales y le pide ayuda a Estrella, pero se acuesta con ella poco después. Sam deduce que ya que Michael no ha matado a nadie es medio vampiro y su condición puede revertirse a la muerte del vampiro jefe.


Sam y los hermanos Frog prueban si Max es el vampiro jefe durante una cita con Lucy pero Max pasa cada prueba y los chicos deciden centrarse en David. Para incitarlo a que mate, este se lleva a Michael a acechar a un grupo de turistas para instigar un frenesí alimentario. Horrorizado, Michael escapa y regresa a casa con Sam. Entonces llega Estrella y se revela como medio vampira que busca ser curada, surgiendo la noticia de que David deseaba que Michael fuera la primera víctima de Estrella, sellando su destino como vampira. Al día siguiente, un debilitado Michael lidera a Sam y los hermanos Frog hasta la guarida de la banda, donde empalan a uno de los vampiros, Marko, con una estaca, despertando a David y a los otros dos aunque los chicos escapan, rescatando a Estrella y Laddie, un niño medio vampiro compañero de Estrella.


                                                      



Esa tarde, mientras Lucy tiene una cita con Max, los adolescentes se arman con pistolas de agua llenas de agua bendita, un arco largo y estacas, bloqueando la casa. Cuando cae la noche, la banda de David ataca y los hermanos Frog y Nanook logran matar a Paul (Brooke McCarter) empujándolo a una bañera llena de ajo y agua bendita, disolviéndolo hasta el esqueleto. Sam es atacado por Dwayne (Billy Wirth), otro vampiro, antes de disparar una flecha a través de su corazón y hacia el estéreo tras él, electrocutando a este y haciendo que partes de su cuerpo exploten. Luego Michael es atacado por David, obligando a que use sus poderes vampíricos, logrando dominar a David hasta empalarlo en un conjunto de cuernos.


Sin embargo, Michael, Estrella y Laddie no se transforman de nuevo en normales como esperaban. Después Lucy regresa a casa con Max, quien se revela como el vampiro jefe, informando a los chicos que invitar a un vampiro a su propia casa le deja a uno indefenso sobre dicha criatura, imposible de aprovechar cualquier debilidad que tenga allí, explicando porque su anterior suposición parecía ser incorrecta. Max también revela que había enseñado a David a que convirtiese a Sam y Michael en vampiros para que Lucy no rechazase transformarse, ya que su objetivo era que esta fuera la madre de sus niños perdidos. Mientras Max tira de Lucy hacia él, preparándose para transformarla, acaba siendo aniquilado cuando el abuelo estrella su todoterreno atravesando la pared de la casa y empalando a Max en un poste de madera que hace que explote.


Michael, Estrella y Laddie regresan a la normalidad, y entre esta matanza y los escombros, el abuelo por casualidad recupera una bebida de la nevera y declara que una cosa de vivir en Santa Carla que nunca he podido aguantar: todos esos malditos vampiros.


                                             




Al repasar Jóvenes ocultos nos encontramos con la mejor comedia de terror vampírica que nos dio el último tramo de los 80, en retrospectiva el gran acierto de WB por contar con Patric y Sutherland para triunfar entre el público a partir de un presupuesto modesto, logrando un resultado muy rentable y con una estética visual bastante reconocible. Temas como la anarquía sexual y el papel del género en la cultura juvenil también se dejan notar. Con fallos pero sumamente pasable, la intriga vampírica adolescente de Schumacher mezcla terror, humor y mucho estilo visual con interpretaciones destacadas de un reparto repleto de jóvenes estrellas de los 80.


De Nosferatu a Von Carstein ha habido cambios en la representación de los vampiros en el folclore popular, no hay más que recordar lo que ya se dijo cuando se analizó Lo que hacemos en las sombras, la inspiración en el terror viene siempre de lugares insospechados y como prueba están los homenajes, el detalle más amado por los aficionados al género. Schumacher quedó algo perdido cuando le hablaron de hacer secuela, a lo que Sutherland añadió que de haber una precuela sería para que le dieran por saco a Vampiros del surf, la cual arruinó el legado de la original. Como será que en las tres el único que ha repetido ha sido Feldman, que hubiera hecho una cuarta si no fuera porque la franquicia ya estaba muerta.


                                                     



Se habló de una serie televisiva sobre los Hermanos Frog, pero también se quedó sin hogar, aunque ha habido secuelas en cómic para el sello Vértigo.


Puntuación: 7


                                                       




Comentarios

Entradas populares de este blog

El padrino: Parte III (1991)

El padrino: Parte II (1975)

Scream: Vigila quién llama (1997).