Babadook (2015)
Si está en una
palabra o en una mirada, nada puedes hacer contra Babadook
Terror
psicológico escrito y dirigido por Jennifer Kent, una cineasta de
Australia que se ha beneficiado del éxito de su obra gracias al
público extranjero. Protagonizada por Essie Davis, Daniel Henshall y
Hayley McElhinney, el largometraje australiano tuvo su paso por
Sundance y se consideró un tipo de cine cercano al arte, ya que el
monstruo Babadook triunfó por ejemplo en la taquilla británica
pero con ello resaltó los problemas que tuvo en su propia patria. La
música es de Jed Kurzel y la distribuye eOne.
Amelia
Vanek es una viuda afligida y exhausta que vive en la ciudad
australiana de Adelaida, adonde se ha traído consigo a su hijo de
seis años, Samuel. Su difunto marido, Oskar, murió en un accidente
de coche que ocurrió cuando conducía a Amelia al hospital para su
parto. Sam ha comenzado a demostrar un comportamiento errático,
volviéndose insomne y preocupado por un monstruo imaginario contra
el que ha construido armas para combatirle. Amelia se ve obligada a
recoger a su hijo del colegio tras llevar Sam una de las armas allí.
Una noche, Sam le pide a su madre que le lea un libro pop up llamado
Señor Babadook, que describe al monstruo titular, un
humanoide alto de cara pálida con sombrero de copa.
Con
sus dedos en garras, Babadook atormenta a sus víctimas tras ser
conscientes de su existencia. Amelia queda trastornada por el libro y
su misterioso aspecto, mientras que Sam se convence de que Babadook
es real, pues persiste en que este hace que Amelia a menudo pase
noches sin poder dormir mientras trata de consolarlo. Poco después,
ocurren extraños sucesos: puertas que se abren y cierran
misteriosamente por sí solas, extraños sonidos que se oyen, Amelia
hallando en su comida esquirlas de cristal. Ella atribuye esas cosas
al comportamiento de Sam, pero él culpa a Babadook. Amelia rasga
el libro y se deshace de él. En su fiesta de cumpleaños, la prima
de Sam, Ruby, le atemoriza por no tener un padre.
Como
respuesta a este abuso, le echa de su casa en el árbol y como
consecuencia ella se rompe su nariz por dos lados. La hermana de
Amelia, Claire, admite que no soporta a Sam, a lo cual la madre le
parece bastante ofensivo. De regreso a casa, Sam tiene otra visión
de Babadook y sufre una convulsión, por lo que Amelia consigue
sedantes de un pediatra. A la mañana siguiente, Amelia halla el
libro de Señor Babadook armado de nuevo en el escalón de
la entrada principal. Nuevas palabras se burlan de ella diciendo que
Babadook se hará más fuerte si continúa negando su existencia,
conteniendo troquelados de ella matando a su perro Bugsy, Samuel y
luego a ella misma.
Aterrada,
Amelia quema el libro y acude a la policía tras una llamada
telefónica inquietante. Sin embargo, Amelia no tiene pruebas del
acoso y cuando entonces ve el traje de Babadook colgado detrás de la
recepción, se va. Amelia comienza a aislarse cada vez más,
encerrándose e impacientándose, gritando a Samuel por desobedecerla
constantemente, teniendo visiones frecuentes una vez más de
Babadook. Su estado mental decae lentamente y muestra un
comportamiento errático y violento, incluyendo el cortar la línea
telefónica con un cuchillo y luego blandiéndolo agresivamente hacia
Sam sin darse cuenta. Esto delega en alucinaciones perturbadoras en
las que Amelia mata violentamente a Sam.
Poco
después de estas visiones, Amelia ve una aparición de Oskar, quien
se ofrece regresar con ella si trae al chico con él.
Percatándose de que es una creación de Babadook, Amelia huye y es
acechada por toda la casa con este pisándole los talones hasta que
finalmente la posee. Bajo su influencia, le rompe el cuello a Bugsy e
intenta matar a Sam. Logrando atraerla hasta el sótano, el chico la
noquea y esta despierta atada con el niño aterrado a su lado. Cuando
trata de estrangularlo, Sam le acaricia el rostro cariñosamente,
provocando que regurgite una sustancia negra entintada que
aparentemente expulsa a Babadook. Cuando Sam le recuerda a Amelia que
no puede hacer nada contra él, una fuerza invisible aparece.
Sam
es arrastrado hasta el dormitorio de Amelia, y tras salvarlo, se ve
obligada por Babadook a revisar una visión de la muerte de su
marido. Furiosa, se enfrenta a este, logrando su mejor retirada en el
sótano, cerrando la puerta tras ella. Tras este calvario, Amelia y
Sam logran recuperarse, siendo ella más atenta y cariñosa con él,
animándole cuando hace las armas e impresionándose por los trucos
mágicos de Sam. Recogen en un tazón lombrices que Amelia lleva al
sótano, donde reside Babadook, poniendo el cuenco en el suelo para
que los coma. Sin embargo, cuando la bestia trata de atacarla, Amelia
lo amansa y este se retira a su rincón, llevándose las lombrices
mientras ella regresa al patio para celebrar el cumpleaños de Sam.
Kent
estudió en el Instituto Nacional de Arte Dramático, donde se formó
como directora años antes de debutar con este largometraje , una
película de terror sin sangre ni sustos baratos. Le propuso a Lars
von Trier colaborar en Dogville, lo cual le sirvió de
experiencia para Babadook, donde quería hablar sobre la
necesidad de afrontar la oscuridad que se oculta en nuestro interior.
Y lo hizo con este filme, un descenso parental en forma de cuento
espeluznante sobre una madre en crisis con influencias de Los
ojos sin rostro, La matanza de Texas, El carnaval de las almas, El
resplandor y Vampyr. Sin duda la película es de lo más
escalofriante que se ha hecho recientemente, además con financiación
de Kickstarter.
La
visión se realizó y Babadook ya entraba a formar parte de la
cultura de Australia, con la trama ambientada en la zona meridional
del país. Fue crucial la inspiración de cineastas como Jean Epstein
y títulos como La brujería a través de los tiempos o La
casa del horror. Llegó llamando a la puerta con un estreno
limitado que evitó a los espectadores australianos, confiando en
terror real en vez de sobresaltos baratos, presumiendo de una
historia franca y sinceramente emotiva que inicia todos los hechos.
Asusta y sorprende como en su día Attack the Block. William
Friedkin, director de El exorcista, la comparó con Alien
y Las diabólicas. En Tumblr y Netflix se la consideró
como algo más que una película de terror con monstruo.
Y
es que Babadook se convirtió en un icono gay oficial, lo cual puede
dejar del todo pasmado a quien lo lea, porque no es parte de la
cultura LGBT ni este es marica, es un ser raro, por lo que tal vez
todo sea cuestión de tomárselo con humor, de ahí que en Twitter se
usase su imagen con dicho propósito, siendo la mascota no oficial
entonces del mes del Orgullo y con ello recaudando fondos en muchas
ciudades en eventos especiales. A la directora, Kent, le resultaron
muy graciosos los memes LGBT de Babadook. Con todo, no hay que
olvidar que el monstruo real es la pena por perder al ser querido.
Puntuación:
6,5
Comentarios
Publicar un comentario