El americano (2010)
George Clooney es...
Película
de suspense dirigida por Anton Corbijn y protagonizada por George
Clooney, Johan Leysen, Björn Granath y Violante Placido, en la que
Clooney se oscurece para dar vida al personaje de la adaptación del
libro en que se inspira y que escribió Martin Booth. Con música de
Herbert Grönemeyer, es una producción de Focus Features rodada en
Sulmona, un pueblo de los Abruzos, así como en otros de alrededor:
Castel del Monte (en la provincia de L´Aquila),
Castelvecchio Calvisio, Calascio y Campo Imperatore, y también
por Pescina y Cocullo, en las cercanías de Pescara. Fuera de Italia
se filmó en Östersund y Jämtland, en Suecia. El coche que conduce
Clooney es un Fiat Tempra.
Jack,
armero y asesino a sueldo, junto a su amante, Ingrid, están de
descanso en Suecia. Este se ve asustado por un rastro de huellas en
la nieve, diciéndole a ella que vuelva al refugio. Disparos de
francotirador suenan cerca suya e Ingrid ve como Jack saca un arma
de su bolsillo y dispara al francotirador. Sabiendo que su identidad
está en riesgo, y con poca duda, Jack dispara y mata a Ingrid. Huye
a Roma y contacta con su entrenador, Pavel, quien insiste en que Jack
no puede quedarse allí, enviándole a Castelvecchio Calvisio, un
pequeño pueblo en las montañas de los Abruzos. Jack se pone
nervioso y se deshace del teléfono móvil que le dio Pavel, yéndose
en su lugar a la cercana Castel del Monte (L´Aquila).
Allí
en los Abruzos Jack se hace llamar Edward, contactando con Pavel,
quien le pone en marcha para otra tarea. Se reúne con Mathilde, una
asesina que quiere que le monte un rifle de francotirador a medida.
También comienza a ser cliente de una prostituta, Clara, empezando
ambos una relación separada de sus deberes comerciales. Jack
vuelve a reunirse con Mathilde para probar el arma, quedando
impresionada por la artesanía del producto, pero le pide que le
haga unos cuantos ajustes. Luego, Jack se percata de que está siendo
seguido por el asesino de Suecia, al que mata. Se ve atormentado en
sueños por los acontecimientos allí y se arrepiente de matar a
Ingrid.
Su
amistad y conversaciones con un sacerdote local, el padre Benedetto,
le anima a preguntarse por sus elecciones vitales. Tanto Mathilde
como Clara se dan cuenta de la relación de Jack con las mariposas:
la primera por su experiencia con las especies amenazadas y la
segunda por su destacado tatuaje. Cuando el padre Benedetto le
cuenta a Jack que percibe que vive en una clase especial de infierno,
un lugar sin amor, el protagonista comienza a dejarse amar por Clara,
concibiendo una vida con ella. Más tarde, Jack habla con Pavel una
última vez, preguntando como le han encontrado los suecos. En su
temor creciente sospecha incluso de Clara cuando descubre una pequeña
pistola en su bolso.
Al
preguntar a Clara por el arma queda satisfecho con su explicación,
todo ello para defenderse, ya que los periódicos han informado de
que ha habido prostitutas asesinadas. Jack acepta entregar el arma a
Mathilde como su último deber, pero en el momento definitivo reabre
el maletín en el punto de entrega y sospecha que ella planea
matarlo. Antes de que pueda pasar algo, llega un autobús lleno de
escolares y Mathilde le paga a Jack con un sobre grueso lleno de
efectivo, tras lo cual los dos se separan. Mathilde se aleja
conduciendo y contacta con Pavel, quien le pregunta si ha matado a
Jack, a lo que responde que no, que le sigue y que lo hará. Clara
queda con Jack cuando pasa una procesión religiosa por el pueblo.
Jack
le pide que se vayan juntos y ella acepta, pero Mathilde trata de
dispararlo desde una azotea cercana, pero el rifle le explota en su
cara, confirmándose la sospecha de Jack y su decisión en el último
minuto de sabotear el arma. Viendo caer a Mathilde desde el tejado,
Jack le da a Clara el sobre lleno de todo el pago en metálico y le
dice que vaya a un río donde estuvieron de excursión para que le
espere. Corre hacia Mathilde, quien se está muriendo sobre la acera,
descubriendo que ella también trabaja para Pavel. Cuando Jack va al
encuentro de Clara, oye que Pavel está detrás suya,
intercambiándose disparos y con este muriéndose. Al conducir Jack
para quedar con Clara en el río, nota algo en su abdomen.
Jack
se percata de que le han disparado, por lo que llega al merendero y
al ver a Clara se desmaya, con ella gritando y corriendo hacia el
coche mientras una mariposa blanca revolotea hacia el cielo desde
el auto.
En
esta cinta uno puede deleitarse viendo los pueblos tan bonitos que
hay en Italia, como por ejemplo Pacentro, o bien oyendo la música
compuesta por Grönemeyer y otros temas, ya sea Madama Butterfly ,
Tu vuò fà l ´americano o a Patty Bravo. Hay influencias de
las películas del Oeste, como ese homenaje a Hasta que llegó su
hora, con Henry Fonda, así como a los spaghetti western, con
las bandas sonoras de Ennio Morricone para El bueno, el feo y el
malo. Hubiera quedado magnífico tener una escena en Venecia como
tributo a Amenaza en la sombra, de Nicolas Roeg. Sin haber
leído la novela en que se basa, podría decirse que algunos diálogos
están extraídos de El cónsul honorario de Graham Greene.
Rodada
bellamente y emocionalmente contenida, El americano es una
intriga de espionaje extrañamente divisoria, una que depende de una
igualmente atípica y apagada actuación de Clooney. Recuerda
bastante a la de Alain Delon en El silencio de un hombre, de
Jean-Pierre Melville.
Puntuación:
6
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