Gravity (2013)
No te sueltes
Thriller
de ciencia ficción dirigido, escrito, montado y producido por
Alfonso Cuarón, protagonizado por Sandra Bullock y George Clooney
como dos astronautas americanos que se quedan tirados en el espacio
exterior tras la destrucción del transbordador que les suspendía
en el aire, y su intento de regresar a la Tierra. Cuarón escribió
el guion junto a su hijo Jonás e intentó desarrollar el filme en
Universal. Más tarde, los derechos de distribución fueron
adquiridos por Warner Bros. David Heyman, quien trabajó
anteriormente con Cuarón en Harry Potter y el Prisionero de
Azkaban , le produjo la película mediante Heyday Films. Gravity
se filmó íntegramente en Reino Unido.
Esta
historia es una de las tantas aclamadas obras de su director,
principalmente por la fotografía de Emmanuel Lubezki, la banda
sonora de Steven Price, la interpretación de Bullock, los efectos
visuales de Framestore y su correcto uso del 3D. Fue sin duda el
mejor título estadounidense de 2013 y una buena noticia para su
estudio, el octavo mejor estreno por encima de los de superhéroes de
las dos grandes compañías. En los 86º Oscar fue reconocida con
siete premios, incluyendo mejor director para Cuarón, música,
sonido, dirección fotográfica, montaje y efectos especiales. La
protagonista se quedó sin el galardón de mejor actriz y el de mejor
película se lo arrebató 12
años de esclavitud.
También
arrasó en los premios BAFTA como mejor película británica y mejor
director, se llevó el Globo de Oro en dirección, los premios de la
crítica cinematográfica y otros galardones de ciencia ficción y
fantasía, aunque Cuarón asegurase en los Oscar que Gravity
no era realmente de dicho género a tenor del sufrimiento que padece
el personaje de Bullock, por lo que nunca le veremos dirigir otra
vez una película espacial. Sea como fuere, Gravity
funciona tanto como
espectáculo intrigante de ciencia ficción como una magnífica obra
de arte, entre la Tierra y el Cielo, para combatir la Ley de Murphy
en medio de potentes imágenes y mucho dramatismo.
El
transbordador de la NASA Explorer,
comandado por el
veterano astronauta Matt Kowalski (Clooney),
está en la órbita de la Tierra con la misión STS-157 para servir
al telescopio espacial Hubble. La doctora Ryan Stone (Bullock)
está a bordo de su primera misión espacial como especialista de la
misma para realizar una serie de actualizaciones en el hardware del
Hubble. Durante una actividad extravehicular, Houston alerta a la
tripulación del Explorer
de la presencia de un arma antisatélite que ha provocado un
síndrome de Kessler, es decir, una oleada masiva de basura espacial.
Kowalski, usando una Unidad de Maniobra Tripulada, rescata a Stone y
se dirige con ella a la Estación Espacial Internacional.
La tripulación ha sido evacuada
a la Soyuz TMA, por lo que deben tomar en su lugar la del Programa
Tiangong, a 100 km, para así abordar la Shenzhou y regresar en su
capsula espacial. Stone entra de nuevo en la estación internacional
a través de la esclusa de aire de la cámara Pirs. Tras un intento
conmovedor de comunicación por radio con un esquimal de la Tierra,
Stone pierde la conciencia pero se percata de que aún puede usar los
retro cohetes de la Soyuz para alcanzar la Tiangong. Luego consigue
llegar a la Shenzhou justo cuando entra en la atmósfera con la
cápsula, finalizando en amerizaje después de estar aislada tanto
tiempo arriba en el espacio.
Bullock
aceptó el papel tras su divorcio con Jesse James, un experto en
motos muy popular en la televisión estadounidense, lo cual explica
porqué Cuarón logró un desenlace tan darwiniano en Gravity.
Sólo por protagonizar
la película, la actriz ganó 70 millones de $ y se unió a un
Clooney que sustituyó a última hora a Robert Downey Jr. Otro
detalle curioso es que Jonás fue quien tuvo la idea de que Bullock
hiciese una llamada de peligro al esquimal Aningaaq, descartando la
idea de comunicarse con un ciudadano del Reino Unido desde la EEI.
Gravity
tiene un empuje muy potente gracias a ella y al 3D. La evolución
biológica en la conclusión del filme contiene un significado muy
profundo.
Y
es que Cuarón es un gran narrador visual, lo cual en Gravity
se traduce en metáforas
como las que rodean al papel de Clooney, escrito por un propósito
concreto, ser una alegoría para que su compañera vuelva al líquido
amniótico o a la abiogénesis, el momento en que aparecieron los
anfibios. Esta misma ha estado reposando en la nave como un embrión,
sujeta en el exterior a cables como si fueran un cordón umbilical y
regresa a su hogar rodeada de meteoritos, los cuales pudieron
contener elementos que facilitaron la vida en el planeta. Como puede
leerse, todo muy en deuda con el existencialismo, ya que Gravity
es una película que
filosofa sobre la existencia de lo que no es.
Desde un punto de vista
cristiano, este filme vendría a ser una alegoría de Dios o Jesús.
En otras palabras, abre la puerta a la realidad de Dios. Un obispo
católico opinaría de esta forma porque el supremo hace posible el
contacto con el creyente en el cielo según su religión, de forma
que podamos reemplazarlo por otros iconos sagrados: el Ganges, San
Cristóbal, Hotei. Cuarón deseaba rodar algo sobre alunizajes desde
que vio de niño al Apolo 11 tripulado por Neil Armstrong, por lo que
con el tiempo pensó en llevarlo a cabo y estuvo a punto de reclutar
para Gravity a Angelina Jolie y a Downey Jr. Para ello se
inspiró en Viaje a la Luna y estudió la ley de la física en
cintas como Atrapados en el espacio.
Universal perdió la oportunidad
de hacer Gravity y tener a Bullock como estrella al rechazar
el guion cinematográfico de Cuarón, ya que el director nunca
volvería a realizar una cinta espacial otra vez. Su premisa era lo
que su hijo mostraría en el filme Desierto, con el mismo
dolor que aquí padece la protagonista y la similar metáfora del
aislamiento. Antes que ella, Jolie pasó del papel y puso al
proyecto en una órbita muy agitada toda vez que Warner ya lo tenía
en sus manos. La hija de Jon Voight rechazó así mismo una secuela
de Wanted y se debatía entre su debut tras la cámara con
En tierra de sangre y miel, e incluso la posibilidad de filmar
otra continuación, la de Salt.
Marion Cotillard también hizo
la prueba para Gravity,pero acabaría yéndose a Origen
con Leonardo DiCaprio y luego filmaría en su país a las órdenes de
su marido Pequeñas mentiras sin importancia. Otra actriz que
tampoco lo pudo conseguir fue la protagonista de Gossip Girl
y The Town, Blake Lively, quien recibió la oferta cuando
rodaba en Manhattan la conocida serie de TV. Para la parte femenina
se requería una actriz que evocase al personaje de Tom Hanks en
Náufrago, por lo que antes que Bullock estuvieron optando al
rol Naomi Watts, Carey Mulligan, Scarlett Johansson, Sienna Miller,
Abbie Cornish, Rebecca Hall y Olivia Wilde. RDJ sonó como
protagonista masculino aquí y en Hijos de los hombres.
Cuarón le ofreció el papel
femenino a Natalie Portman a instancias del estudio debido a su gran
actuación en Cisne negro, llevándola a descartar el rol para
la historia de supervivencia en 3D. Y en cuanto a Downey, este se
marchó a un proyecto nunca realizado hasta la fecha que iba a
dirigir Shawn Levy, dejando vía libre a Clooney. Los gráficos por
ordenador se rodaron en los estudios Pinewood y Shepperton, mientras
que el aterrizaje se filmó en el Lago Powell, siendo la escena final
y el mismo lugar donde llegaron los astronautas de la primera versión
de El planeta de los simios, toda una conexión extraordinaria
al parecer escogida por Heyman, el productor, y Cuarón, quienes lo
consideran un escenario épico del género.
Gravity dura 2 horas y
Cuarón mete un prólogo de 13 minutos en una sola toma. Para alguien
que se tomó siete años en regresar a la gran pantalla supone una
preparación minuciosa, como el hecho de que los uniformes son muy
especiales (de la misma persona que hizo el vestuario de Spectre)
o que las cámaras empleadas para grabar son de Arri de película de
70 mm. Lubezki y su equipo trabajaron al detalle para dotar al filme
de un dramatismo técnicamente ambicioso al ambientarse en el espacio
exterior con total ingravidez. Por eso se recurrió al ordenador, ya
que la escena inicial ininterrumpida comenzó con una vista clara de
una brillantemente iluminada Tierra y acabó con la destrucción del
Explorer .
Ello podía permitir hacer
travellings al ser un filme IMAX con el estilo de un documental de
Discovery Channel. Lubezki incorporó imágenes de la NASA y de la
Agencia Espacial Federal Rusa para ponerlas en movimientos durante el
proceso de fotografiado y dar una sensación de bidimensionalidad,
logrando así unas tomas increíbles al nivel de otro gran
profesional del gremio, Vittorio Storaro. Los efectos visuales
estuvieron al cargo de Tim Webber y el equipo al completo de
Framestore, ganadores de varios BAFTA y que reprodujeron más escenas
por CGI que en Avatar de James Cameron. Es por eso que
Gravity se considera un avance tecnológico en cine gracias
al uso de la estereoscopía, de 2 a 3D.
Price compuso la música
cinematográfica de Gravity, una banda sonora de 23 minutos
que son como un traqueteo de nervios, incluyendo canciones de Hank
Williams Jr, Djay Adx y Arvo Pärt. Para Bullock y Clooney su semana
mundial del espacio supuso ver como sus carreras renacían
disparándose por las nubes desde que protagonizaron respectivamente
Speed y Ocean´s Eleven. Por tanto no había problema
del que informar a Houston gracias a la presencia de ambos y de
Cuarón tras la cámara, elevando las expectativas con su enorme
recaudación mundial en salas (y curiosamente también como la más
descargada en internet). Su director nos muestra el temor y el
asombro que debe sentirse allá en el espacio.
La épica espacial de Warner con
sólo dos actores (vaya dos artistas por cierto) y con Cuarón
al mando enseña cosas que no pueden ser, pero milagrosamente pasan
en la temible y bella realidad del mundo sideral que está por encima
del nuestro. Si el cine del pasado está muerto, Gravity nos
lleva a contemplar la gloria del que será el del futuro, intrigando
a muchos niveles porque el director es un visionario del celuloide al
más alto grado y eso es algo irrebatible. Su tenso thriller de
ciencia ficción es inquietante y además de magistralmente dirigido
es visualmente imponente. No puede tener mejor despegue esta odisea
espacial aterradora pero tiernamente angustiosa.
Por si fuera poco hace
constantes guiños a otras obras maestras cósmicas como Apolo
13, Alien y 2001. No parece que esté tan sobrevalorada
como se dijo tras su estreno (ese deshonor lo ocuparía para un
servidor La gran estafa americana) y es porque se trata de una
producción notablemente diseñada que se ha llevado, Oscars aparte,
una gran variedad de premios, dominando en los de la academia
estadounidense, donde Cuarón ya es un habitual recogiéndolos
(bueno, allí y en más ceremonias), demostrando el peso
importante que ha ido ganando con cada historia que nos ha brindado,
sencillamente espectacular. No quiero terminar sin aludir al aspecto
más relevante del espacio: su silencio.
La precisión científica de
Gravity se ha comprobado y Cuarón se ha tomado ciertas
libertades en su cinta encabezada por Bullock. Frente a todo lo que
se ha dicho hay mucha ficción, como puede corroborarse respecto a
las órbitas de la EEI y el TEH ,y otras cinco cosas que no podrían
pasar realmente. El qué hay detrás de toda la ciencia del filme nos
puede hablar de cuan realista es y si un astronauta puede llegar a
experimentar todo lo padecido por la actriz principal. Para muestra,
Mike Massimino (que ha salido en Big Bang), veterano de las
misiones de la STS-109 y 125, afirmó que todo había sido extraído
de experiencias reales.
Puntuación:
7,5
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