28 semanas después (2007)
Todo comienza de nuevo
Vuelve
el terror apocalíptico, esta vez de la mano del cineasta español
Juan Carlos Fresnadillo, quien escribe y dirige esta secuela de 28
días después relevando a Danny Boyle y con un reparto formado
por Robert Carlyle, Rose Byrne, Jeremy Renner, Harold Perrineau,
Imogen Poots e Idris Elba. La trama muestra los esfuerzos de las
fuerzas militares de la OTAN para salvar una zona segura en Londres
tras los acontecimientos de la película anterior, con las
consecuencias de dos jóvenes hermanos que rompen el protocolo para
encontrar a su madre infectada y la resultante reintroducción del
Virus de la Rabia en la zona segura. Fue la primera vez que el
canario trabajaba fuera de nuestro país.
Durante
el brote original del Virus de la Rabia, Don (Carlyle), su
esposa Alice y cuatro supervivientes más se ocultan en una cabaña
bloqueada en las afueras de Londres. Oyen a un chico aterrorizado
aporreando su puerta al que dejan entrar, y unos pocos minutos más
tarde, descubren que los infectados han seguido al chico, atacando y
matando estos a la mayoría de supervivientes, mientras que Don,
Alice y el chico son perseguidos hasta el piso de arriba. Don le
suplica a Alice que abandonen al chico, pero ella se niega, aunque
este se ve obligado a marcharse cuando los infectados irrumpen en su
habitación entrando por la ventana. Don acelera hasta una lancha
cercana, escapando por poco tras una pelea con otro superviviente.
Una
vez de que los infectados comienzan a morir de inanición, las
fuerzas de la OTAN toman el control de Gran Bretaña. Veintiocho
semanas después del brote, una fuerza comandada por los americanos
bajo el mando del general de brigada Stone (Elba) trae nuevos
colonos, entre los cuales están los hijos de Don y Alice, Tammy
(Poots) y Andy, quienes estaban fuera del país durante el
estallido, siendo admitidos en el Distrito Uno, una zona segura en la
Isla de los Perros, el único distrito de Londres en cuarentena y
protegido por el ejército de los Estados Unidos. El sargento Doyle
(Renner), un francotirador de los Delta Force y su amigo,
Chief Flynn (Perrineau), piloto de helicóptero, están entre
las tropas que defienden el distrito.
Tammy
y Andy se reúnen con su padre, hallado por el ejército de EEUU y
que se ha convertido en el protector del distrito. En su nuevo piso,
Don se inventa una mentira sobre las circunstancias que rodean a la
muerte de la madre de los niños. Esa noche, Andy sueña que ha
olvidado el rostro de su madre, por lo que él y Tammy salen de la
zona segura y regresan a su antiguo hogar, donde recogen fotografías
familiares y otros recuerdos. Para su sorpresa, Andy encuentra a
Alice viva y sin infectar, en un estado casi consciente y delirante.
Pronto los tres son descubiertos por soldados y llevados de vuelta al
Distrito Uno, con Alice enviada a una sala de cuarentena, donde la
chequean y hallan que es portadora del virus.
Don
realiza una visita no autorizada a Alice en su celda de aislamiento,
suplicándole que le perdone, la cual ella acepta y le dice que lo
ama, pero cuando se besan Don se infecta con la rabia y la mata
salvajemente para luego enfurecerse aún más. El general Stone
ordena que el edificio sea puesto en cuarentena y que se active una
alerta de Código Rojo en el Distrito Uno, con los civiles arreados
en habitaciones seguras, pero pese a las precauciones, Don irrumpe
en una sala llena de gente e inicia un efecto dominó que provoca que
la multitud, con la mitad de sus miembros infectados, se escapen de
la habitación segura hacia las calles. Scarlet (Byrne), una
oficial médico del ejército de EEUU, rescata a Tammy y Andy
mientras que a los soldados del Distrito Uno se les ordena que
disparen indiscriminadamente.
Doyle,
incapaz de cumplir con dicha orden, abandona su puesto y escapa con
Scarlet, Tammy y Andy junto a otros a través de un paso subterráneo
en Greenwich. Stone ordena que el Distrito Uno sea bombardeado, pero
grandes cantidades de los infectados, incluido Don, huyen de esta
amenaza. Scarlet informa a Doyle que los niños pueden tener la clave
para una cura y que por tanto deben ser protegidos. Flynn llega en
helicóptero para recoger a Doyle, pero se niega a llevarse a nadie
más porque podrían ser derribados por llevar a gente que podría
estar infectada, contactando con su compañero por radio y diciéndole
que deje a los civiles para que vaya hasta el Estadio de Wembley.
Doyle
ignora sus instrucciones y escolta a Andy, Tammy y Scarlet a Wembley,
tomando un Volvo V70 abandonado para escapar del gas nervioso que se
ha soltado para matar a los infectados, pero no pueden arrancar el
coche mientras los soldados aparecen cerca de allí con lanzallamas.
Doyle sale del auto y se sacrifica iniciando el contacto y siendo
quemado vivo. Scarlet escapa con un helicóptero de combate Apache y
lleva a Tammy y Andy hasta el Metro de Londres, donde el trío
continúa a pie, pero Don embosca y mata a la mujer,mordiendo luego a
Andy. Tammy le dispara a su padre antes de que pueda matar a su
hermano, quien permanece libre de síntomas pero desconociendo que es
portador del virus de la Rabia.
Continúan
hasta el estadio y son recogidos por un reacio Flynn, quien
sobrevuela el Canal de la Mancha hasta Francia, tal como le ordenó
Doyle. Otros veintiocho días después, una voz con acento francés
pidiendo ayuda se oye en la radio del helicóptero abandonado de
Flynn, para a continuación pasar a un grupo de infectados corriendo
a través de un túnel, que según van surgiendo al exterior se
revela que es la salida de la Estación de Trocadéro del Metro de
París, con una vista general del Sena cercana a la Torre Eiffel.
Aquí por tanto quedaba planeado que las 28 semanas después
continuarían tal como mostró originalmente Boyle en 28 días
después junto a Alex Garland, quien tampoco repite en esta
secuela.
Los
dos se habían comprometido a cambiar el terror por la ciencia
ficción de Sunshine, quedando como productores ejecutivos de
la continuación y con una trama nueva realizada por Fresnadillo,
conocido por Intacto, un thriller sobrenatural original e
intrigante que tuvo gran éxito en España y con el cual debutó como
director el sustituto de Boyle, dando el salto internacional de
inmediato redactando también el guion. En el reparto de la secuela
no aparecen ni Cillian Murphy ni Naomie Harris, pero tenemos como
protagonistas a Renner y a Perrineau, quienes rodaron la mayor parte
de sus escenas en Canary Wharf, donde se encuentra la Isla de los
Perros que aparece en el Londres de la cinta.
El
Estadio de Wembley estaba recién inaugurado tras su construcción y
sus escenas se hicieron en Gales, concretamente en Cardiff, en el
Principality Stadium, muy parecido al recinto de Londres y al que
añadieron símbolos de riesgo biológico y químico para la ocasión,
igual que para la promoción del filme en los acantilados de Dover.
Fue también por la misma fecha cuando se publicó 28 días
después: Las consecuencias, una novela gráfica que enlazaba
ambas cintas y que incluía una trama secundaria ambientada en
Birmingham y un ejemplar ficticio del London Evening Standard
con titulares sobre la evacuación por el virus. Fox incluso realizó
un videojuego de navegador gratuito para descargar en línea sobre el
filme.
Aunque
28 semanas después carece del humanismo que convirtió a 28
días después en un clásico, tiene una ambientación fantástica
y una dirección contundente, emocionante, repleta de acción y
magistral como thriller por parte de nuestro compatriota, quien
insufla vida al original, obteniendo un producto brutal y casi tan
terrorífico y agotador como cualquier película de zombis debería
ser, inteligente en sus ideas y técnicas. Trasladando todo esto al
género de moda de los superhéroes, era lo que se esperaba de
Spiderman 3 y que no llegó a verse, tal como suena. Lo peor
es que ni Boyle ni Garland, tras colaborar por última vez en
Sunshine, vayan a cerrar la trilogía con 28 meses después.
Ninguno
se ha mostrado entusiasta de concluir la saga debido a la irrupción
de la serie televisiva que parece haberse apropiado de la temática,
The Walking Dead, que ya la supera en años.
Puntuación: 6,5
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