Posesión infernal (2013)


        La película más aterradora que has visto en tu vida

                                   
Fede Álvarez debutó como director en esta cinta que él mismo escribió con el respaldo en producción de Bruce Campbell, Robert Tapert y Sam Raimi. Rodada en Nueva Zelanda, concretamente a las afueras de Auckland, muchos nos preguntamos cómo de malvada sería esta nueva versión de Posesión Infernal, la cuarta entrega de la franquicia que reinicia la original de 1981 y que continúa la trilogía de terror sobrenatural de la mano del cineasta uruguayo, estrenándose con un festival visualmente sangriento que respeta la esencia del clásico. Desde hace unos años se ha especulado si habría secuela y cruce con la trilogía original, pero por lo visto el estudio TriStar deberá ponerse de acuerdo para ello, ya que Sony se hizo con la franquicia hace un tiempo de manos de StudioCanal.

                                                            

Al comienzo se revela que la chica asustada que se encuentra en el bosque en donde varios hombres la han capturado y atado dentro de un sótano está sufriendo una posesión demoníaca, por lo que su padre, Harold, (Jim McLarty) la inmola disparando a su cabeza. Más tarde, David Allen (Shiloh Fernandez) y su novia Natalie (Elizabeth Blackmore) llegan a una cabaña en el bosque, donde la pareja se reúne con la hermana menor de este, Mia (Jane Levy), y sus amigos Eric (Lou Taylor Pucci) y Olivia (Jessica Lucas). El grupo planea quedarse en la cabaña mientras que Mia supere su adicción a la heroína, revelándose luego que David se mudó a Chicago años antes, dejando a su hermana al cuidado de su agonizante madre. El grupo descubre el sótano, contaminado por cadáveres de animales en descomposición, una escopeta y un libro llamado Necronomicón.

                                                    
Eric es el único que tiene conocimientos de brujería y por tanto quien comienza a estudiar el libro. Pese a las advertencias escritas, lee en voz alta un encantamiento de magia y despierta una fuerza malévola que halla a Mia fuera del lugar sola y de pie. La chica empieza a ver a una muchacha ensangrentada en el bosque, rogándole al grupo que se marchen porque está asustada. Estos se niegan creyendo que ella simplemente experimenta los efectos del síndrome de abstinencia, por lo que Mia roba las llaves del coche y conduce lo más lejos posible de la cabaña, pero una chica misteriosa provoca que choque hasta caer en un pantano. Emergiendo del barro, la chica demoníaca persigue a Mia por el bosque.

                                                       
Mia tropieza en un claro redondo por culpa de un arbusto espinoso y queda enredada por las vides poseídas. La chica, una forma demoníaca de Mia, regurgita una brea negra con forma de vid espinosa desde su boca que repta hasta la muchacha para poseer su cuerpo, a lo que David y Olivia, tras dar con ella, se la llevan de vuelta a la cabaña. Después, el chico halla a su perro asesinado con un martillo ensangrentado, por lo que decide hablar cara a cara con Mia, quien está en la ducha. En el cuarto de baño, David la ve quemándose bajo el agua, por lo que trata de conducirla al hospital, pero unas fuertes lluvias inundan la única carretera de vuelta. Mientras, Eric está cada vez más convencido de que el libro lo ha causado todo.

                                           
Esa noche, la Mia poseída entra en el salón con una escopeta y dispara a David en el brazo mientras un fuerte viento sopla por toda la cabaña, advirtiendo a los otros que morirán esa noche, tras lo cual se desmaya. David le dice a Olivia que le quite el arma a Mia , pero antes de que lo haga esta se despierta y la domina, para a continuación arrojar vómitos de sangre por toda la cara de la chica. Olivia se las arregla para deshacerse de Mia, mandándola rodando hasta el sótano en dónde es encerrada por Eric. Olivia va al cuarto de baño para lavarse y de paso coger un sedante para Mia, pero se aterra al ver su propio reflejo desfigurado en el espejo, el cual explota, por lo que trata de ir corriendo hasta los otros, pero se queda paralizada y poseída durante el proceso.

                                                      
Eric encuentra a Olivia cortándose su mejilla con una esquirla del espejo tras la cortina de la ducha, a lo que esta le ataca y le hiere, agarrando el chico un trozo roto del fregadero con el que la aporrea hasta matarla. En el cobertizo, David le cura las heridas a Eric y este le cuenta un secreto, que cree que mientras leyó el libro desató algo infernal. Mientras, Mia atrae a Natalie hasta el sótano, dónde le muerde la mano, a lo que la chica trata de atacar a su agresora con una navaja, pero Mia se la quita y la usa para cortarse su lengua en dos mitades antes de darle un beso sangriento a Natalie en la boca. David abre la trampilla e interrumpe el ataque, permitiendo a Natalie que huya, a lo que el demonio (Rupert Degas) le dice que Mia ya no existe, por lo que la encadena y la deja encerrada detrás de la puerta del sótano.

                                                                      
Eric le explica a David que, según el Necronomicón, el Ladrón de Almas debe reclamar cinco espíritus para poder desatar a la Abominación. En la cocina, mientras se limpia la herida de la mordedura, Natalie se convence de que su brazo está infectado y procede a amputarlo con un cuchillo eléctrico. David hace lo que puede para curarle su brazo herido, mientras Eric continúa explicando que Mia debe ser purificada bien siendo enterrada viva, desmembrada o incinerada. Conforme lo discuten, la poseída Natalie ataca a los chicos con una pistola de clavos, pero David logra cercenarle el brazo que le queda con la escopeta, sacando a la chica de la posesión aunque acabando por matarla al desangrarse encima suya.

David planea prender fuego a la cabaña con Mia dentro, pero sin embargo ella empieza a cantar una canción de su infancia y entonces cambia de idea, decidiendo enterrarla, cavando una tumba y entrando a continuación en el sótano para contener a su hermana, quien intenta ahogarlo. Eric interviene y la noquea, no sin antes ser gravemente apuñalado y acabar sucumbiendo a sus heridas. David procede a sedar y enterrar a Mia, exhumando y desfibrilando a la chica, lo que provoca que el demonio se someta a un exorcismo y la cure. Los hermanos se reconcilian y en cuanto David entra en la cabaña para recuperar las llaves del coche, el cadáver poseído de Eric le apuñala en el cuello con un objeto cortante, un alambre de púas. David encierra a Mia afuera y dispara a un bidón de gasolina, destrozando el cuerpo de Eric y sacrificándose.

Con las cinco almas ya aseguradas, la Abominación surge y del cielo llueve sangre, por lo que mientras Mia combate contra esta se ve obligada a arrancarse su mano tras quedarse atrapada bajo el coche. Finalmente parte en dos a la Abominación con una motosierra, haciendo que el cadáver de la cosa quede sepultado en el suelo y se detenga la lluvia de sangre. Mia huye al bosque y vaga en la distancia, ignorando que el Necronomicón aún está intacto. En la escena pos créditos, la silueta de Ash Williams (Campbell) aparece por sorpresa diciendo Guay y rompiendo la cuarta pared antes del fundido a negro. Antes ha habido incluso una pequeña aparición de su hermana Cheryl, con la voz de Ellen Sandweiss.

                                                  
Las iniciales de los cinco protagonistas forman un acróstico en inglés que significa DEMONIO (David, Eric,Mia,Olivia,Natalie). Con ello Álvarez logra traer todo un espíritu del tiempo a su versión de Posesión infernal, la cual escribió en colaboración con su socio y compatriota Rodo Sayagues, alterado y acabado para la ocasión por la guionista Diablo Cody (Jennifer´s Body) en un esfuerzo por americanizar el diálogo al no ser ambos anglo parlantes, todo ello por orden del productor de la original, Tapert, quien además sugirió el cameo final de Campbell y reclutar a Fernandez para un papel principal. Lily Collins pudo haber sido la actriz protagonista, pero perdió dicha oportunidad en detrimento de Levy.

Los siguientes en entrar en la nueva versión de Posesión infernal fueron Pucci y la actriz de Melrose Place, Lucas. Esta nueva generación era la elegida para vérselas con el libro de los muertos, ser rociados de muchos litros de sangre y vísceras y hasta de conocer en persona al tipo que hace su cameo al final. Álvarez, con experiencia usando CGI en sus cortos, recurre a este menos de lo que cabría esperarse en su primer largometraje, haciendo un guiño al pasado al incluir el Oldsmobile 88 de Raimi al principio, todo un referente del automovilismo en EEUU. Fede también comentó por Twitter que la película sería no recomendada a menores de 17, lo que le obligó a recortar material para poder estrenarla en cines.

A todo esto, no hemos dicho que la música la compone el español Roque Baños, conocido por las bandas sonoras de Alatriste y Las 13 Rosas. El murciano crea una partitura muy acorde al ambiente sangriento de la película, que quizás carecerá del humor absurdo que enfatizaba la original, pero con su nueva apariencia lo compensa con terror brutal, sustos cruentos y su muy violenta tendencia al regocijo gráfico, toda una emocionante explosión que aunque no mejora a la original si que satisface a quienes no confiamos en los remakes, pero claro, Álvarez tiene mucho talento para el terror, por lo que creemos que si no hace secuela de Posesión Infernal que al menos haga de El ejército de las tinieblas.

                                                      
Resumiendo, en esta nueva versión de Posesión Infernal hay nuevos personajes, nueva historia y hasta un cameo de Bruce Campbell, por lo que no hay que alarmarse de que no sea de Raimi, que quizás proyecte hacer algo relacionado con la tercera parte de su trilogía, o incluso que fusionen las tramas de ambas, pero no parece claro que Fede Álvarez regrese para la secuela, aunque si le seguís en sus redes sociales puede que os llevéis alguna sorpresa, tampoco hay que perder la fe en su futura participación. Al menos siempre nos quedará la ya cancelada serie de televisión Ash vs Evil Dead.

Puntuación: 6,5

                                                             

                                                



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