Flamin´Hot: La historia de los Cheetos picantes (2023)

                                                               

Comedia dramática biográfica dirigida por Eva Longoria, escrita por Lewis Colick  y basada en el origen de la marca de aperitivos que presuntamente inventó Richard Montañez, aquí interpretado por Jesse García, al que acompañan en el reparto Dennis Haysbert y Tony Shalhoub. Tras su buena acogida en el festival South by Southwest, fue adquirida por Hulu y Disney + , llegando a estar nominada en los 96º Oscar  a mejor canción original, compuesta por Diane Warren, pero perdió ante What Was I Made For?  de Barbie. 

En 1966, en el sur de California, Richard Montañez se cría como un niño trabajador con un padre estricto y un abuelo alentador. Conoce a su futura esposa Judy en la escuela donde comienza a vender burritos a los otros niños. Es arrestado de joven cuando nadie cree que ha ganado  su dinero honestamente. De adultos, Richard y Judy se casan pero viven como rufianes en una banda, apurándose para sobrevivir. Hacen un esfuerzo por cambiar sus vidas toda vez que Judy se queda embarazada de su primer hijo. Tras un último arresto, el juez le dice que cambie su estilo de vida. Con un segundo hijo después, Richard y su familia aún luchan por llegar a fin de mes cuando el protagonista busca un trabajo honesto. Finalmente este busca ayuda en su amigo, el ex matón Tony Romero, quien le echa una mano para tener un puesto en Frito-Lay. Pese a mentir en su currículum, el director de planta Lonny Mason lo contrata. 

Richard comienza a prestar atención a todos los matices de la fábrica y empieza a seguir al director  ingeniero de mantenimiento Clarence C. Baker para que le enseñe  a usar las máquinas. Pese a alguna reticencia, Baker acepta y enseña a Richard como operar toda la maquinaria en la fábrica. Desafortunadamente, la política económica de Estados Unidos durante la administración Reagan comienza a afectar seriamente a los empleos mal pagados  y las acciones de Frito-Lay comienzan a bajar. Finalmente esto resulta en que algunos de los trabajadores son despedidos. El director ejecutivo de Frito-Lay, Roger Enrico, comunica por vídeo un mensaje animando a los trabajadores a que "piensen como un jefe" , lo cual inspira a Richard. 

Tras recoger a sus chicos de la escuela, Richard los lleva a tomar unos elotes (maíz mexicano callejero). Dándose cuenta de que a su hijo menor Steven le gusta el sabor picante, diciendo que "pica bien" (que arde), se percata de que la forma de salvar a Frito-Lay es lanzar la marca al mercado latino. Convence a Baker y al resto  de sus colegas para que le dejen llevarse a casa algunos Cheetos sin sabor añadido, pero Judy le propone que hable primero con su padre, Vacho, para un trabajo. Este acaba denigrando los planes de Richard, provocando que Judy le apoye aún más. Los Montañez trabajan incansablemente tratando de encontrar el perfecto sabor picante para los Cheetos, dando finalmente  con la mezcla  justa. Richard intenta lanzar su idea a Lonny sólo para ser rechazada, obligándole a colarse y copiar el número de teléfono de Enrico. 

Richard se las arregla para contactar con Enrico, quien, aunque perplejo por que le ha llamado un conserje, está intrigado por saber que ha visto  su vídeo  y le pide que le envíe sus Cheetos con sabor picante. Los prueba  e inmediatamente queda enganchado, organizando una reunión  en la fábrica al instante. Mientras que Lonny está molesto con Richard, este se prepara para la presentación, logrando finalmente la aprobación  de su padre para que lo respalde. Richard se dispone a hablar de corazón  y su propuesta es aceptada, con los Cheetos Picantes Flamin´Hot puestos en producción. Aunque esto resulta dar más empleos, el nuevo sabor no termina de salir de las estanterías. Decepcionados, los niños de Richard señalan que  no hay anuncios para el sabor. Nuestro protagonista regresa a trabajar  y les pide a todos que usen sus habilidades para vender el nuevo sabor en la calle. La táctica funciona y Enrico llama para pedir que la fábrica produzca un pedido aún mayor. 

Mientras que Baker consigue el ascenso que siempre deseó, Richard es aún conserje, pese a que Baker le da algo de ánimos. Lonny le pide a Richard que limpie arriba, sólo para encontrar a Enrico, quien le cuenta que comprende  los sacrificios que ha tenido que hacer desde que creció, antes de revelar que lo ha ascendido a director de marketing multicultural. Richard es aplaudido por todos sus colegas debido a su éxito  y felizmente llama a Judy para contarle las buenas noticias. 

Longoria ha debutado como directora en esta película sobre los Cheetos picantes         Flamin´Hot, una producción ya en desarrollo cuando Searchlight era de Fox. Realmente no parece que el protagonista inventase estos aperitivos, y de hecho hubo gente molesta porque la historia no fue como muestra la cinta. La estrella de la función, García, comentó que los proyectos latinos no tienen el "lujo de ser fallidos" y que la polémica por quien los inventó fue lo que retrasó su rodaje y estreno. Una película biográfica sobre un inventor de unas patatas de paquete  no es una producción tan atrayente como otras basadas en hechos reales ambientadas en el mundo laboral, lo cual no quita que sean trabajos o empleos dignos. 

Flamin´Hot  es una historia real, pero por lo que he explicado antes tiene sus matices, ya que ante todo esto es una obra de ficción y no un documental veraz. Puede ser que Montañez no fuera sincero del todo, que su viaje desde la planta de la fábrica hasta  ser ejecutivo de Pepsi tenga más cuento que otra cosa, pero es tan grandilocuente  que como otros creadores  necesitaba ser una película y encima dirigida por una latina influyente como Longoria, a la que el estudio confió el proyecto. Cuesta creer que un conserje de Frito-Lay inventase los Cheetos Picantes Flamin´Hot que por aquí sólo se conocen porque se venden en tiendas de alimentación de exportación de bases militares estadounidenses, por tanto a través de ciudadanos norteamericanos. Aunque disputado, el propio Montañez ha afirmado que él ha sido el mejor embajador que ha tenido la compañía. 

Yo personalmente no he comido muchos Flamin Hot en mi vida, ya que la marca de Frito-Lay  hace unos productos que al masticarlos suenan ruidosamente  y siempre he tirado más por la competencia, aunque en general  este tipo de aperitivos lo único que consiguen es que te pongas muy obeso. De todas formas, la película muestra como en EEUU funcionan las cosas, a base de aplastar a tus rivales  con trabajadores capaces de todo. Ese sueño americano que tantas veces se nos ha vendido, de como un conserje  de una filial de Pepsi  llega a ejecutivo sólo por poner picante  a los Cheetos  y estudiar unos cuantos libros de empresariales sin acudir a la carrera. No existe tal cosa como el ser solamente un conserje, nada es gratis en esta vida o mundo, porque nadie da nada por nada, así es el ciclo empresarial estadounidense  de expansiones y contracciones laborales, hablando estadísticamente y en abstracto de como se trabaja en ese país. De hecho, Frito-Lay recortó unos 1.800 puestos y Pepsi se ahorró con ello unos 100 millones de $. 

El guionista de la película la ha defendido diciendo que hay bastante de real  en la historia, que no existe tal polémica, en lo cual ha coincidido Longoria, quien aboga por Montañez como el inventor o creador de los Cheetos picantes. Repito, esto no es un documental avalado por el gobierno estadounidense  y lo que refleja es que la población de ese país tiene diferentes oportunidades según sus orígenes, así como un comentario acerca de como el multiculturalismo sostiene a la sociedad en general. La ahora cineasta aporta autenticidad  y evita la controversia, es su primer trabajo tras una cámara  y lo hace con una historia optimista de  pobre que se hace rico, la cual además se ha estrenado a la vez en dos plataformas hermanas (Hulu sin embargo sólo está disponible en EEUU y aquí se ve por Disney+). 

La patata frita picante cuya historia no parece muy real es ante todo una estrategia de propaganda muy bien programada, un telefilme muy correcto y económico que por algo ha evitado los cines, porque esto no es Avatar  aunque el logro de Montañez parezca ciencia ficción. Se deja ver por la curiosidad, porque es una historia muy cotidiana, y es que esta  Flamin´Hot  puede parecer que comparte con los Cheetos el que esté saturada de calorías, pero  es una decente propuesta cinematográfica, divertida y optimista, inspiradora como toda historia de no favoritos  con la que muchos nos podemos identificar cuando hemos tenido alguna vez un sueño loco o imposible de realizar. Muy entretenidamente imprime la leyenda detrás de la creación de la marca, como hacerse rico con unas patatas picantes. Un debut prometedor como directora el de Longoria. 

Nadie necesitaba una historia de origen de unos Cheetos picantes, pero Flamin´Hot   es una historia encantadora, típica de festival  y reivindicativa para la población hispana, porque los latinos son ante todo personas muy humildes y trabajadoras, además de muy alegres cuando tienen algo que celebrar. 

Puntuación: 6,5