Starship Troopers (Las brigadas del espacio) - 1998

                    El genocidio no se compara con esto

                                           

Sátira de ciencia ficción militar y acción dirigida por Paul Verhoeven y escrita por Edward Neumeier sobre exterminadores interestelares e irascibles insectos que amenazan la galaxia. Basada en la novela Tropas del espacio , un referente del género obra de Robert A. Heinlein que sigue a la Infantería Móvil desde el reclutamiento militar de un futuro suboficial a hasta su ascenso a oficial de las fuerzas armadas. Estamos ante una de las películas más incomprendidas de todos los tiempos, y eso que fue nominada al Oscar a los mejores efectos visuales en la 70º edición, lo que la convierte en una de las 100 mejores de los 90, con los bichos arácnidos como enemigo aparente de los humanos que entran reclutados.

Un nativo de Buenos Aires, Johnny Rico (Casper Van Dien), pretende alistarse en la inteligencia militar, pero acaba en la Infantería Móvil tras un mensaje por carta al haber hecho las pruebas de combate . Una vez allí, por un error que le cuesta la vida a varios de su escuadrón, es castigado con azotes. Luego debe ir desplazado hasta el planeta de los invasores y allí lo dan por muerto en combate, pero milagrosamente sobrevive y se une a las fuerzas especiales, ascendiendo de rango según progresa la misión. Los bichos suelen usar su probóscide para aniquilar a los militares, quienes contraatacan con un arma nuclear táctica. El filme termina con propaganda militar donde se promete que la lucha continuará.

Tropas del espacio culmina la triple labor del holandés en la ciencia ficción. Su trilogía del filmes en el género se detuvo aquí después de que leyese dos capítulos del libro porque le parecía muy aburrido. Intentó leerlo pese a ser la obra maestra de Heinlein, pero para él era una lectura bastante mala, pidiéndole a Ed Neumeier que le contase la historia porque era incapaz de leerla. Le parecía que era una novela muy de derechas, y por eso con la película trató de salir adelante al menos en parte comentando lo mismo pero con otro ritmo. No había otra forma de comerlo, se tenía que luchar contra todo el fascismo y el ultra militarismo de la novela para que el público se preguntase porqué tanta locura.

Las tierras baldías de Wyoming son el escenario real escogido por Verhoeven y Neumeier para recrear el planeta de los insectos de la película. En relación con la novela, Verhoeven se burla del militarismo en este clásico de culto que tozudamente desecha las ideas de Heinlein, toda la absurda naturaleza del Servicio Federal y demás sinsentido propio del fascismo, la xenofobia y la propaganda al estilo de Leni Riefenstahl en El triunfo de la voluntad, sobre el Servicio de Trabajo del Reich y el nazismo, los Camisas negras y las labores de Albert Speer, dependiendo en exceso de todo el imaginario nazi. Michael Ironside, quien suele colaborar con el director, sabía todo lo que pasó este en su país durante la 2GM.

La temática alude a lo propagandístico, como aquí con el NODO, y detalles como el vestuario se inspira en el de los generales de las SS. Por eso reincido en que durante aquella década esta y otras películas estuvieron muy infravaloradas y sólo en el futuro, hoy día, se las aprecia mucho más. Como sátira de la 2GM y de la guerra de Corea sería una mezcla entre Sin novedad en el frente y Star Trek. Neumeier, guionista de Robocop, ataca al fascismo con el mismo entusiasmo que Verhoeven para ambos darnos uno de los notables divertimentos de finales de los 90. Es una película entretenida si aceptas el exceso de sangre y las interpretaciones tan rígidas que se muestran.

El complejo industrial-militar sale peor parado que nunca, mientras que Van Dien representa a un blanco cinematográfico que originalmente era asiático en el libro. Con varios premios Saturn en su bolsillo, la película ha conocido unas pocas de secuelas, todas siguiendo el legado de la primera pero de peor calidad, ya sea El héroe de la federación o Armas del futuro, así como la animada Traidor de Marte. Incluso hubo una serie derivada que quedó en cliffhanger. La influencia se ha dejado notar en batallas de otras obras posteriores como Halo, Elysium, Distrito 9, Iron Man, Al filo del mañana o El juego de Ender. En los videojuegos de táctica en tiempo real y de mesa también han cobrado vida los métodos de la trama.

Otro tipo de videojuegos donde se nota mucho la mano de la historia son los de disparos en primera persona, como el Half-Life Counter Strike. Neal Moritz se ha propuesto hacer una nueva versión, planeando reiniciarla ahora que está Trump en la presidencia.

Puntuación: 7