Ash vs Evil Dead (2015-18)
Comedia
de terror televisiva desarrollada por Sam Raimi y su hermano Ivan
para Starz, filmada en Auckland, Nueva Zelanda, y situada dentro de
la franquicia creada por el primero, Evil Dead,
con Bruce Campbell retomando su papel de Ash Williams y funcionando
como secuela de la trilogía original. También la protagonizan Ray
Santiago, Dana DeLorenzo y Lucy Lawless, con producción de Campbell,
Raimi y Robert Tapert, los mismos responsables de las cuatro
películas que tantos seguidores tiene desde su aparición y que ha
durado un total de tres temporadas hasta su reciente cancelación,
dejando huérfano al público de una de las mejores series de
temática sobrenatural del género fantástico actual.
La
serie está ambientada aproximadamente 30 años después de las
primeras tres películas de Evil Dead,
sirviendo como secuela a esa trilogía. Ash
trabaja en un mercado al por mayor como un simple empleado de
suministros, teniendo como compañero de trabajo en la tienda a su
amigo Pablo y a la chica que le gusta a este, Kelly. Aparentemente
Ash ha hecho poca cosa en su vida desde que regresó del 1300 DC al
final de El ejército de las tinieblas,
pues al principio le vemos viviendo en una caravana y bebiendo solo
en los bares. Sin embargo, Ash deberá renunciar muy pronto a su
rutina existencial y convertirse en héroe otra vez empuñando las
armas contra los Zombis Diabólicos titulares, causa a la que se le
unen Pablo y Kelly en su lucha por salvar a la humanidad.
En
el cambio que ha seguido al personaje de Campbell en estas tres
décadas, Ash tiene la culpa del superviviente desde lo ocurrido en
El ejército de las tinieblas,
un apogeo dentro de su trastorno por estrés postraumático similar
al de un veterano de guerra que no quiere hablar sobre aquello y que
mentirá con respecto a ese muñón en su mano para impresionar a
las señoritas. Es un tipo con problemas emocionalmente atrofiado,
pero sobre todo es aquel al que quieres a tu lado en la trinchera. En
toda la primera temporada se revela que ha ido a la deriva de pueblo
en pueblo durante treinta años tras los sucesos de la trilogía
cinematográfica y viviendo en su caravana con su mascota, un
lagarto llamado Eli.
Ash
también ha trabajado en una serie de empleos sin futuro en
diferentes ramas de la tienda, intentando a la vez destruir el
Necronomicón en múltiples ocasiones, pero incapaz de deshacerse del
libro en su lugar se ha convertido en su cuidador oficial. En la
segunda temporada se revela que Ash regresó a su ciudad natal de
Elk Grove, Míchigan, tras los acontecimientos de las películas, y
la gente de allí se negó a creer sus historias sobre los Deadites,
acusándole por tanto de asesinar a sus amigos y a su hermana en la
cabaña, evitándolo y bautizándolo como Ashy Slashy (Ash
el pequeño destripador). Pablo
Simón Bolívar (Santiago),
compañero de Ash, se convierte en su leal secuaz al haberle creído
como un héroe.
Es
por eso que le apoda El Jefe
como signo de respeto. Realmente Santiago parece estar entrenado como
el sucesor de este, ya que fue criado por su tío, un chamán que le
contaba historias sobre un poder maligno que sólo puede ser
derrotado por El Jefe. Lucha
valientemente junto a Ash y Kelly antes de ser desgarrado
literalmente por el demonio Bael, aunque luego fue resucitado, y
mediante un ritual en la tercera temporada, Pablo sustituye a a su
tío como brujo especial al adquirir precognición. Kelly Maxwell/ La
Bruja Kaya (DeLorenzo)
es una muchacha ocasionalmente malhumorada y reacia ante lo que
sucede al principio,viéndose arrastrada a la lucha contra el mal
junto a Ash y Pablo tras quedarse huérfana de su familia, que era
judía.
Trabajó
temporalmente en la tienda junto con Ash y Pablo hasta que su madre
(Mimi Rogers) murió
en un accidente de coche unos seis meses antes del comienzo de la
serie. En la primera temporada hay otra actriz, Jill Marie Jones,
quien encarnó a Amanda Fisher, una agente de la policía estatal
de Míchigan que siguió a Ash tras la muerte de su compañero.
Lawless es Ruby Knowby / Rebecca Prevett, un personaje misterioso a
la busca y captura de la fuente de los recientes brotes malignos,
asegurando ser la hija del profesor Raymond Knowby y por tanto
hermana de Annie, la de Terroríficamente muertos,
pero luego se revela que ella es un ser inmortal que escribió el
Necronomicón.
Michelle
Hurd interpretó en la segunda temporada a Linda Bates-Emery, la
novia de Ash en el instituto y que ahora está casada con Emery, el
sheriff de Elk Grove, con quien tiene una hija, Lacey. Es una de las
pocas personas en el pueblo contenta de ver regresar a Ash. También
tenemos en esta tanda a Ted Raimi como Chet Kaminski, un viejo amigo
de la infancia de Ash muy fiestero y que en secreto tuvo una
relación muy íntima con la hermana de este, Cheryl, todo esto
treinta años antes, por lo que acabará pagando un alto precio por
ello. En la tercera temporada tenemos a Lindsay Farris, quien hace de
Dalton, miembro de los Caballeros de Sumeria, una antigua orden
dedicada a combatir el mal.
De
vuelta a la primera temporada, Samara Weaving dio vida a Heather, la
única superviviente de un grupo de senderismo, rescatada por Pablo
y Kelly cuando llegan a la cabaña, aunque luego es asesinada
indirectamente por Ruby cuando el mal se desata. Hemky Madera es en
esta y en la tercera El Brujo, el tío chamán de Pablo y a quien
acude junto a Ash y Kelly para pedir ayuda contra el demonio
Kandariano. Desafortunadamente lo mata otro demonio, Eligos, cuando
practica un exorcismo sobre Kelly para librarle de su servidumbre
hacia este ente. Lee Majors aparece en las dos últimas temporadas
como Brock Williams, el padre de Ash, a quien no ha visto en al
menos 30 años o más.
Desde
la época de Posesión infernal,Ash
heredó de su padre todos sus malos hábitos, sobre todo el
desenfreno y el libertinaje, e incluso se deja entrever que le robaba
las novias a su hijo, como por ejemplo una antigua profesora de
educación física del instituto que le gustaba, Lillian Pendergrast
(en realidad una deadite).
Su trabajo habitual es como dueño de una ferretería cuyo lema es
toda una insinuación: Brock Williams le afila el
serrucho, y además culpa a Ash
de la muerte de su hija, Cheryl, pero entonces, minutos antes de ser
asesinado por el Oldsmobile 88 poseído de su hijo, se percata de que
su chico era realmente un héroe. En la segunda temporada, Stephen
Lovatt hizo del sheriff Thomas Emery, el marido de Linda.
Ash
solía meterse con él en el instituto, pero ahora es el estricto
sheriff de Elk Grove. En esta misma temporada, Joel Tobeck hace de
Bael, un demonio diabólico que fue marido de Ruby y que quiere el
Necronomicón para sus propios propósitos malvados. Sus habilidades
incluyen el usar la avaricia para manipular a otros, poseer cuerpos
humanos y ralentizar el tiempo cerca de un objetivo para poder
cambiarlo o herirlo. Cuando Bael está usando su poder nadie es
capaz de verle salvo quien tenga en frente, aunque Ruby mencionó que
es inmune a los ataques físicos y que sólo puede ser herido por
medios místicos o espirituales. En la tercera, Emilia Burns hace de
Zoë, una guerrera de Sumeria que ayuda a Ash en su lucha.
En
la segunda temporada, Ellen Sandweiss regresa como Cheryl Williams,
procedente de la Posesión infernal original,
igual que Nicholas Hope aparece como el profesor Raymond Knowby.
Campbell y Raimi, la cara y la mente tras Evil Dead,
presentaron su proyecto en la
Con de San Diego con la intención de escribirla para TV como serie
secuela de la franquicia y que se emitiría en Starz a partir de
2015, con Campbell compaginando el rodaje con un cameo en Fargo
y sin sentirse encasillado con
los años en su emblemático papel. Tapert se unió al equipo como
productor regresando a su labor de la saga e incorporando como
reparto a Santiago, DeLorenzo y Jones, para más tarde dar entrada a
Lawless durante el rodaje en NZ.
Por
problemas de derechos con Universal, los hechos de El
ejército de las tinieblas no se
mencionan de inicio, de ahí porqué Ash no trabaja en S-Mart,
ignorando dicha entrega al no poder evocar ni un sólo elemento,
porque el protagonista ha hecho cero progresos o toda su historia del
viaje temporal. Por suerte ya en la segunda temporada se arregló y
empezó a haber referencias a la tercera película, algo que de poco
serviría al cancelarse la serie por parte de la gente de Starz,
alegando una importante caída de espectadores con respecto a la
primera temporada, lo cual a su vez llevó a Campbell a anunciar que
dejaba de encarnar a Ash, al que retiraba de circulación después de
muchos años
Pero
sí algo tenemos los fans es que somos muy cabezotas y en poco tiempo
se intentó hacer saber a Netflix y Amazon que queríamos que su plataforma
fuese la que siguiera emitiendo la serie y que al menos la renovase
por dos temporadas más, hasta una quinta o mínimo una cuarta,
aunque no pudo ser, la estrella del espectáculo había hablado y su
alter ego estaba retirado para siempre. Nos había ilusionado más
que mucho el piloto dirigido por Sam y que escribió junto a su
hermano Ivan o el capítulo donde Ash se imagina que está en
Jacksonville (Florida)
antes de ir a enterrar el Necronomicón. Joseph LoDuca volvió para
componer la música como hiciera en el resto de la franquicia con
Raimi (no así el remake).
Aparte
están los temas de otros artistas como Alice Cooper, Ted Nugent o
Frijid Pink, todos ellos casualmente de la zona de Detroit, igual que
Raimi, si bien se han oído canciones de Deep Purple, que son
ingleses, en general una selecta banda sonora que siempre gusta
escuchar en una serie como esta y que probablemente en un futuro no
habrá otra igual, porque es la obra más personal del cineasta del
estado de Míchigan y en cierto modo hay que agradecer que Starz le
brindara esta corta pero intensa oportunidad de cerrar el círculo
del bueno de Ash y de la línea original de Evil Dead
gestada en los años mozos del
director, leal a la saga principal con su misma seña sangrienta y
divertidísima, una audaz resurrección.
Y
con esto concluyo el recorrido a la querida franquicia de terror de
Raimi, dejando en el recuerdo a unos personajes y un estilo divertido
y dinámico al servicio de la sangre y de lo macabro, con acción y
suspense a raudales pero por supuesto un mogollón de carcajadas.
Puntuación:
8,5
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