Apocalipsis (1994)

                     El fin del mundo es solo el principio

                             

Miniserie de televisión basada en la novela homónima de Stephen King, quien también escribió la adaptación y tiene hasta un pequeño papel. Dirigida por Mick Garris, la protagonizan Gary Sinise, Miguel Ferrer, Rob Lowe, Ossie Davis, Ruby Dee, Jamey Sheridan, Laura San Giacomo, Molly Ringwald, Corin Nemec, Adam Storke, Ray Walston, Matt Frewer, Bill Fagerbakke y Shawnee Smith. Emitida por la ABC, consta de cuatro episodios que pueden verse en una semana y donde se es testigo de una plaga y sus efectos en un escenario apocalíptico de terror puro, con el estado de naturaleza mostrando los fundamentos de la desigualdad entre las personas, un concepto filosófico presente en la obra del autor.

Un 13 de junio, en un laboratorio gubernamental de alto secreto en la zona rural de California, una versión de la gripe que ha sido convertida en un arma es liberada accidentalmente. Un guardia escapa del laboratorio y comienza a viajar por todo el país hasta su localidad natal en Texas, extendiendo involuntariamente el virus por todo el camino. El 17 de ese mes, estrella su coche contra una gasolinera del pueblo de Arnette, donde Stu Redman (Sinise) y algunos amigos suyos se habían reunido. Tirado sobre el suelo y agonizando, el hombre le advierte a Redman de que ha sido perseguido por el Hombre Oscuro. Al día siguiente, el ejército de EEUU llega hasta el pueblo para declarar la cuarentena.

                                          

Los ciudadanos son llevados hasta una instalación del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CCPE) en Vermont. Todos salvo Stu sucumben a la super gripe, la cual mata al 99,4% de la población mundial en dos semanas. Los supervivientes esparcidos incluyen a un aspirante a estrella del rock llamado Larry Underwood (Storke); al sordomudo Nick Andros (Lowe); a Frannie Goldsmith (Ringwald) y su niño nonato de Jesse, su novio de antes de la plaga; a su vecino adolescente Harold Lauder (Nemec); al criminal encarcelado Lloyd Henreid (Ferrer) y al Basurero (Frewer), un incendiario y psicótico chatarrero. Todos ellos pronto comenzarán a tener visiones bien de la amable Madre Abigail (Dee) o del demoníaco Randall Flagg (Sheridan).

Los dos grupos de supervivientes son instruidos en sueños para que viajen a Nebraska para quedar con Abigail o a Las Vegas para unirse a Flagg. Conforme inicien sus travesías, Lloyd es liberado de la prisión por Flagg a cambio de convertirse en su segundo al mando, mientras que El Basurero, un pirómano, destruye depósitos de combustible por todo el Medio Oeste y se dirige hasta Las Vegas. Larry por su parte escapa de Nueva York junto a una misteriosa mujer llamada Nadine Cross (San Giacomo). Pese a la atracción física que hay entre los dos, Nadine no puede consumar su relación con Larry debido a sus visiones de Flagg, quien le ordena que se una a él, por lo que le abandona para viajar por su cuenta.

Tras escapar del recinto del CCPE, Stu reúne a un grupo de supervivientes que incluyen a Frannie, Harold y Glen Bateman (Walston), a quienes se unen luego otros tantos inmunes. Con el grupo viajando a Nebraska, Harold se va sintiendo celoso por el liderazgo de Stu y por su relación cada vez más estrecha con Frannie, por la que está encaprichado aunque su amor no está correspondido. Mientras, Nick se abre paso por el Medio Oeste hasta toparse con Tom Cullen (Fagerbakke), un joven discapacitado mental. Ambos dan con Julie Lawry (Smith), una chica violenta que jura que los matará cuando rechazan que se les una. Finalmente el grupo de Nick llega hasta la granja de Abigail en Hemingford (Nebraska).

Esta les advierte que se avecina un gran conflicto y que de forma inminente todos deben viajar a Boulder, Colorado. Allí, los supervivientes forman una nueva comunidad llamada Zona Libre, donde comienzan a restaurar la civilización. Flagg establece un régimen autócrata en Las Vegas con la intención de derrotar a los supervivientes de Boulder usando armas nucleares rescatadas, mientras que Frannie se siente cada vez más angustiada por su inseguridad respecto a si su bebé será inmune a la super gripe. El resentimiento de Harold hacia Stu y la chica se intensifica, lo que provoca que sea seducido por Nadine y así se una a Flagg, haciéndose este más fuerte.

Abigail, convencida de que ha caído en el pecado de la soberbia, abandona Boulder debido a su espiritualidad, al tiempo que dos de los supervivientes, Tom y el juez Farris (Davis), son elegidos para infiltrarse en Las Vegas. Cullen es hipnotizado para que siga una serie de instrucciones, incluyendo que deje la ciudad en la siguiente luna llena. Harold y Nadine instalan una bomba en la casa de Frannie y Stu, planeando activarla durante una reunión del consejo de la Zona Libre. Una debilitada Abigail regresa al pueblo y da un aviso psíquico a los miembros que se han reunido, permitiendo que la mayoría escapen de la explosión, aunque Nick lamentablemente acabe muriendo.

Antes de fallecer, Abigail le cuenta a Stu, Larry, Glen, Frannie y a Ralph Brentner que deben viajar a Las Vegas para enfrentarse a Flagg. Cuando Nadine y Harold huyen, el villano provoca que el muchacho quede gravemente herido en un accidente de moto con las piernas rotas, a lo que la chica le abandona y este se suicida de un tiro al día siguiente. Flagg la invoca y cuando trata de escapar al negarse a acostarse con él, este le cuenta que ya es muy tarde para rechazarle y por tanto la obliga a hacerle el amor. Nadine queda inconsciente tras el abuso de Flagg y de regreso a Las Vegas, el malvado se muestra cada vez más inestable, topando con Farris, quien es asesinado accidentalmente antes de poder ser torturado.

Tom abandona Las Vegas con la luna llena, pero Julie lo reconoce, por lo que trata de avisar a Flagg, pero Tom escapa al desierto y se oculta del villano y sus hombres. Poco después, una trastornada Nadine se burla de Flagg y se suicida portando el feto profano que concibieron. Al aproximarse el invierno rápidamente, Stu, Larry, Glen y Ralph dejan Boulder para iniciar su misión, con el primero rompiéndose la pierna y quedándose atrás, mientras los otros tres son capturados por Flagg y su ejército. Glen se separa de Larry y Ralph, a lo que Flagg ordena a Lloyd que lo mate tras mofarse de él. Con Larry y Ralph encarando una farsa judicial en la calle Fremont, el Basurero llega con un arma nuclear robada.

Flagg no puede detener con su mano espectral la detonación de la bomba cuando la voz de Abigail declara que la promesa de Dios se ha mantenido, así que Las Vegas es destruida y el villano es aparentemente asesinado. Stu es rescatado por Tom, quien se lo lleva a una cabaña cercana para curar su pierna conforme empieza el invierno. Finalmente regresan a Boulder en medio de una cegadora ventisca de nieve, con Frannie dando a luz a un bebé al que se determina que padece la super gripe, si bien el pequeño sobrevive. Seguros de que los inmunes podrán reproducirse sanos y salvos, los habitantes del pueblo comienzan a reconstruir el mundo que una vez cayó.

                                                      

El actor afroamericano Moses Gunn iba a ser el juez Farris, pero poco antes de filmar se puso muy enfermo y murió poco después, así que Davis le sustituyó al estar su esposa Dee encarnando a Madre Abigail. Ed Harris y Kathy Bates tienen pequeños papeles en la serie al haber protagonizado anteriormente adaptaciones de la obra de King, como La tienda en el caso del actor. El personaje de Bates, locutora de radio, era originalmente un hombre, pero cuando esta aceptó aparecer lo ajustaron para ella, quien guarda una cercana amistad con el escritor tras meterse en la piel de Annie Wilkes en la premiada Misery. Lowe hace del sordomudo Nick Andros, si bien se presentó al papel de Larry Underwood hasta que Garris lo cambió al descubrir que el actor ha carecido de audición en su oído derecho desde niño, por lo que encajaría mejor, igual que Storke, que además es músico.

Ferrer también hizo la prueba para otro papel, el de Randall Flagg, al que se presentaron Christopher Walken (que hizo de Johnny Smith en La zona muerta), Jeff Goldblum, Willem Dafoe y James Woods. El elegido fue Sheridan, un completo desconocido entonces. El traslado de las páginas a la pantalla obtuvo el reconocimiento de dos Emmys, uno al maquillaje y otro de carácter técnico, pudiendo haber logrado más en tales apartados o incluso en el musical, y ya puestos como serie en su conjunto. Y es que entre otros puntos destacados, la acción de la trama requirió el esfuerzo de una super producción de Hollywood, solo que esta invadió un pequeño vecindario de Denver.

                                           

La miniserie de King es un trabajo independiente del resto de su obra, así es como debe verse. Para la TV de su época era todo un gran negocio por el tiempo y dinero invertidos en hacerla realidad como producción de la pequeña pantalla. El problema más irritante que plantea y que es el tema central de Apocalipsis es que una vez que la historia establece pronto sus opuestos esquemáticos del bien contra el mal, la adorable y anciana Madre Abigail frente al satánico Flagg, la monotonía comienza a filtrarse a través de esa compleja estructura que desde luego embarra al conjunto, pero definitivamente Apocalipsis de Stephen King es lo suficientemente astuta para mantenerte en vilo sobre que pasará después.

Mucho antes de esta versión, se planteó llevarla al cine dirigida por George A. Romero y respaldada por Warner Bros. Nunca llegó a hacerse y en su lugar se creó como miniserie, rodada en Salt Lake City, la prisión estatal de Utah y Orem, lugares emblemáticos del estado mormón que Hollywood popularizó tras filmar allí. No quiere decir que jamás vuelva a adaptarse, de hecho la CBS y el legendario estudio han tratado de retomar su posible salto a la gran pantalla, con David Yates reemplazando a Romero tras haber exprimido al máximo la gallina de los huevos de oro que ha sido Harry Potter, apuntando a Steve Kloves como guionista. Las mentes maestras tras la conocida saga volverían para dicho proyecto.

                                                  

Sin embargo ambos salieron del proyecto porque a quien querían realmente era a Ben Affleck, ya que Yates es de los que abogan por una adaptación en formato miniserie. Affleck también lo dejó debido a sus compromisos como Batman con Zack Snyder y el tercero en discordia fue Scott Cooper (Corazón rebelde), otro que también se fue. Josh Boone (Bajo la misma estrella) entró como siguiente candidato a hacerse con los mandos y además surgió el nombre de Matthew McConaughey para encarnar al antagonista, Randall Flagg, por tanto una oportunidad dorada de formar parte del universo de King. No obstante, Boone dejó claro que al texano lo quería como Stu Redman y para Flagg contratar a Christian Bale, manteniendo en su adaptación la máxima fidelidad posible.

Esto implicaba que la trama se dividiría en cuatro filmes, pero luego se cambió a miniserie de ocho capítulos, que por ahora no veremos pronto al ser un proyecto que requiere mucho tiempo. Con todas las adaptaciones que tiene El Rey repartidas en plataformas como Netflix y gozando ahora de una renovada popularidad, no sería raro que aterrizase en canales como Showtime o en el servicio bajo demanda CBS All Access. Mientras tanto, puede disfrutarse de la versión en cómic que publicó Marvel como novela gráfica de seis entregas escrita por Roberto Aguirre-Sacasa e ilustrada por Mike Perkins con la colaboración artística de Chris Eliopoulos y Lee Bermejo. Del primer al último número es un viaje mágico.

Puntuación: 7