Memoria Letal (1996)

Hace  ocho años que perdió la memoria y ahora un detective debe  ayudarla  a recordar su pasado  antes de que los entierre a ambos. Lo que se ha olvidado no siempre se va.

                                

Una de acción  dirigida y producida por  Renny Harlin,  escrita y también producida por  Shane Black, y protagonizada por Geena Davis y  Samuel L. Jackson.

Samantha Caine (Davis) es una profesora  que vive en un pueblo llamado  Honesdale junto a su novio  Hal (Tom Amandes) y su hija  Caitlin (Yvonne Zima). Sin haber recordado nada  acerca de su nombre real  o parte de su vida  antes del día, ocho años antes, que apareció  arrastrada por la marea en la orilla  de una playa de Nueva Jersey, embarazada  de Caitlin y totalmente amnésica, Samantha  ha contratado  un buen número de  investigadores privados para que traten de  descubrir su pasado, siendo el último de ellos  Mitch  Henessey (Jackson), quien le entrega una  maleta que contiene  una nota que dirige a los dos hasta  el doctor Nathan  Waldman (Brian Cox).

Quedan para reunirse  en una estación de tren,  ignorando que  agentes de incognito  están rastreando las llamadas  del doctor. Por el camino, Samantha  descubre que en el fondo de  la maleta  hay  una Remington 700 desmontada que   ella misma puede montar como una experta, junto a otras armas. El doctor revela  el como sabe  que Samantha  es realmente una experimentada asesina  de la CIA que responde al nombre de  Charlene  Elizabeth  Baltimore, alias  Charly, quien desapareció  ocho años atrás.  Inseguros  de si pueden  confiar en él, (debido  al ataque sorpresa del que han escapado  y siendo él  la única persona  con la que han contactado), Samantha y Mitch  abandonan a Waldman  y buscan otro  contacto mencionado en la nota  encontrada dentro de la maleta, Luke (David Morse), de quien creen  que podría tratarse del  prometido de Samantha.

                                                           

Continuando su búsqueda de respuestas,  Charly y Mitch  descubren más cosas sobre  la verdadera identidad de Luke, Dédalo,  el último  objetivo que iba a ser aniquilado  por Samantha y que estaba involucrado  en el Proyecto Luna de Miel, el cual ella  interrumpió  en su misión ocho años antes  y que resultó en  el encarcelamiento de quien la atacó  al principio de la película, Jack el tuerto; el Proyecto Luna de Miel  era la detonación de una bomba química  como parte de una operación de bandera falsa  en el centro de  Niagara Falls (Nueva York), todo planeado por la CIA para culpar  a los terroristas islámicos  y asegurar  mayor poderío económico y control para el departamento.

Charly se da cuenta  de que un nuevo grupo  está conspirando para  reestablecer el ataque, liderados por  su antiguo jefe en la CIA, Leland  Perkins (Patrick Malahide) y  por un especialista  en guerra psicológica llamado  Timothy (Craig Bierko), con quien Charly había tenido  una relación amorosa en el pasado. Ya una vez en el epilogo,  Mitch  disfruta por su parte de  la publicidad que ha atraído su participación  en la crisis, y es visto por última vez entrevistado por  Larry King  en televisión, donde debaten  sobre Perkins, quien ha  sido acusado de traición. Charly ha regresado  a su segunda identidad  de Samantha Caine.

                             

El guion fue escrito por  Black, quien  era a comienzos de los 90 uno de los guionistas mejor pagados  en Hollywood. El personaje de Mitch Henessey se suponía  originalmente que  debía ser blanco  y judío además de tener un nombre diferente; Matthew Broderick  y  Richard  Dreyfuss fueron ambos considerados  para el papel al dar dicho perfil.  El estudio  consideró cambiar  a  Sam Caine /Charlie Baltimore por un personaje masculino  y también  pensaron para esa posibilidad en  Steven Seagal  y  Sylvester  Stallone.  La película se rodó en  Toronto, Hamilton, Collingwood,  Milton, Uxbridge, Wasaga Beach,  Unionville y Muskoka, todos ellos en  Ontario, Canadá.

                                        

La escena en la que  Charly (Davis) hacía un  salto Axel y disparaba a sus oponentes de arriba abajo en mitad del aire  fue  desechada  cuando resultó ser imposible de filmar y que pareciese natural y creíble. Aún sin ella, es una película con un montón de diversión  pero con un guion que tiene bastantes  puntos débiles, lo que no quita que la admire  como ejemplo de  producción artesanal del género, pero eso sí,  menudo  malgasto de tiempo y dinero  en algo sin  entidad real, insuficiente como para darle una secuela, aunque si lo pensáis bien, ¿ no hemos visto tramas similares después en American Ultra o El caso Bourne?

Puntuación: 6,5