Vengadores: Infinity War (2018)

                                         

Película de superhéroes basada en el equipo de Marvel Los Vengadores (creados por Stan Lee y Jack Kirby), producida por el estudio de Kevin Feige y distribuida por Disney, secuela tanto de Los Vengadores como de La era de Ultrón, ambas del UCM . Dirigida por los hermanos Russo y escrita por Christopher Markus y Stephen McFeely , la cinta presenta un reparto coral que incluye a Robert Downey Jr, Chris Hemsworth, Mark Ruffalo, Chris Evans, Scarlett Johansson, Benedict Cumberbatch, Don Cheadle, Tom Holland, Chadwick Boseman, Paul Bettany, Elizabeth Olsen, Anthony Mackie, Sebastian Stan, Danai Gurira, Letitia Wright, Dave Bautista, Zoe Saldaña, Josh Brolin y Chris Pratt. En el filme, los Vengadores y los Guardianes de la Galaxia intentan prevenir que Thanos junte las seis todopoderosas Gemas del Infinito  como parte de su misión  de matar a la mitad de toda forma de vida  en el universo. 

Inspirada en la obra de Jim Starlin Guantelete del Infinito y en la de Jonathan Hickman Infinito, la producción se hizo  en los estudios Trilith  del condado de Fayette, Georgia, con todos los actores y actrices que venían de anteriores entregas del UCM para poder concluir la saga del Infinito aquí y luego con Endgame (paradójicamente se ha analizado antes el desenlace). Esta ha sido una de las películas más costosas de la historia del cine de Hollywood, formando parte de la Fase Tres  y siendo una de las últimas más sobresalientes del género recientemente, magnífica en todos los aspectos y desde luego el estreno más potente de su año, con mayor recaudación que ningún otro en Norteamérica y además, nominada a mejores efectos visuales en los 91 Oscar. Quizás mereció alguna nominación extra Brolin, cuya interpretación en las escenas de acción dan a esta película el tono oscuro y el peso emocional por la que tanta aclamación ha logrado entre el público. 

Habiendo adquirido la Gema del Poder, una de las seis Gemas del Infinito, del planeta Xandar, Thanos y sus lugartenientes, Ebony Maw, Cull Obsidian, Proxima Midnight y Corvus Glaive, interceptan la nave estelar Estadista que transporta a los supervivientes de la destrucción de Asgard (como se vio en Thor: Ragnarok). Tras contener al hijo de Odín,  Thanos extrae la Gema Espacial, domina a Bruce Banner y mata a Loki. El villano también mata a Heimdall  tras mandar a Hulk  a la Tierra usando el Bifrost. Thanos y sus lugartenientes  se van, destruyendo la nave. 

                                                               

Hulk aterriza de emergencia  en el santuario de Nueva York, revertiendo a la forma de Bruce Banner. Este avisa a Stephen Strange y Wong acerca del plan de Thanos  de destruir la mitad de toda vida en el universo, por lo que reclutan a Tony Stark. Maw y Obsidian llegan para recuperar la Gema del Tiempo  de Strange, llamando la atención de Peter Parker.  Maw, incapaz de coger la Gema del Tiempo debido al encantamiento de Strange, lo captura. Stark y Parker se escabullen a bordo de la nave espacial de Maw mientras Wong  se queda detrás para guardar  el santuario. 

Los Guardianes de la Galaxia responden a la llamada de emergencia  de la nave asgardiana y rescatan a Thor. El dios del trueno conjetura que Thanos va tras la Gema de la Realidad, que Taneleer Tivan posee  en Sapiencial (como se vio en Thor: El mundo oscuro). Este viaja con Rocket y Groot a Nidavellir para conseguir la ayuda  del  rey enano Eitri en crear el hacha de guerra Stormbreaker. Peter Quill, Gamora, Drax y Mantis viajan a Sapiencial, descubriendo que Thanos ya tiene la Gema de la Realidad. El villano secuestra a Gamora, quien revela la localización  de la Gema del Alma para salvar a Nébula de la tortura. En Vormir, el guarda de la Gema, Cráneo Rojo, le cuenta a Thanos que sólo él puede adquirirla sacrificando a alguien que ame. Thanos sacrifica a Gamora, logrando la Gema. 

En Edimburgo, Midnight y Glaive emboscan a Wanda Maximoff  y Visión para recuperar la Gema de la Mente  de la frente  de Visión. Steve Rogers, Natasha Romanoff  y Sam Wilson los rescatan y buscan refugio junto con James Rhodes  y Banner en el recinto de los Vengadores. Visión le pide a Wanda que le destruya a él y a la Gema de la Mente para evitar que se la quede Thanos, pero Wanda lo rehúsa. Rogers sugiere que viajen a Wakanda, que él cree que tiene los recursos para retirar la Gema sin  matar a Visión. 

Nébula escapa de su cautiverio y pide a los restantes Guardianes que queden con ella  en el destruido planeta natal de Thanos, Titan. Stark y Parker matan a Maw y rescatan a Strange. El trío aterriza de emergencia en Titan, donde se reúnen con Quill, Drax y Mantis. Usando la Gema del Tiempo, Strange ve millones de posibles futuros, viendo sólo uno en el que ganan los Vengadores. El grupo formula un plan para contener a Thanos y retirar el Guantelete del Infinito, con el que este guarda y hace uso  de forma segura  de las Gemas. Thanos aparece, justificando sus planes como necesarios para garantizar la supervivencia  de un universo superpoblado. Nébula llega apenas después y ayuda a los otros a reprimir a Thanos, pero entonces deduce que Thanos ha matado a Gamora. Encolerizado, Quill ataca al villano, involuntariamente permitiéndole romper la unidad del grupo para dominarlos. Thanos hiere gravemente a Stark, pero Strange ofrece la Gema del Tiempo a cambio de perdonar la vida de Stark. 

                                                                   

En Wakanda, Rogers se reúne con Bucky Barnes antes de que el ejército de Thanos invada. Los Vengadores, junto con T´Challa  y las fuerzas wakandianas, montan una defensa mientras Shuri trabaja para extraer la Gema de la Mente de Visión . Incapaz de invocar a Hulk tras perder ante Thanos, Banner lucha en la armadura Hulkbuster de Stark. Thor, Rocket y Groot llegan para reforzar a los Vengadores. Juntos matan a Midnight, Obsidian y Glaive, derrotando de forma aplastante al ejército de Thanos. Shuri no puede completar la extracción antes de que el propio Thanos llegue al campo de batalla, desacelerado sólo brevemente por Banner, Rogers, T´Challa, Wilson, Rhodes, Barnes, Okoye, Romanoff y  Groot. Visión convence a una reacia Wanda para que lo destruya junto a la Gema  de la Mente, pero Thanos usa la Gema del Tiempo para revertir sus acciones, arrancar la gema  de la frente de Visión y así completar el Guantelete. Aunque Thor hiere severamente  a Thanos con la Stormbreaker, el titán loco activa el Guantelete ya completado e inicia la Aniquilación mediante un Chasquido antes de  teletransportarse. 

La mitad de toda la vida a través del universo se desintegra, incluyendo a Barnes, T´Challa, Groot, Wanda, Wilson, Mantis, Drax, Quill, Strange, Parker, Maria Hill y Nick Furia, el último de los cuales  envía una señal de emergencia  en un busca modificado antes de desintegrarse (identificado fuera de pantalla como un mensaje para Carol Danvers, quien como ya se comentó en la anterior entrada, es la Capitana Marvel y su rol en el final tan salvaje  aquí no es más que la antesala de su película individual y del desenlace en Endgame).  Stark y Nébula permanecen tirados en Titan mientras Banner, M´Baku, Okoye, Rhodes, Rocket, Rogers, Romanoff y Thor  se quedan en el campo de batalla wakandiano. Mientras, Thanos observa un amanecer  en un planeta remoto. 

                                                    

Estas dos últimas entregas de los Vengadores analizadas han sido la despedida oficial de Downey del UCM. Ya en Spider-Man: Homecoming  se vislumbraba su final  en la franquicia como mentor del personaje de Holland. Es por eso que Iron Man  tiene una nueva armadura, siempre necesaria. En cuanto a Hemsworth, esta era la primera de tres películas que le quedaban, por lo que a día de hoy también ha dejado el UCM. Por ello los hermanos Russo no perdieron la oportunidad de juntar a Thor con Star-Lord y que de esta forma los guionistas modificasen  Infinity War  para James Gunn. Los héroes  se ponen serios de verdad en la Fase 3, donde Feige obtuvo la matricula de honor como responsable de la saga. Ruffalo nos prometió un arco épico  para Hulk cuando hizo  la tercera de Thor y aquí llega a la mitad, pues concluiría en Endgame. 

                                                             

Ruffalo y Boseman representan la parte en la que los Vengadores se unen cuando llegan a Wakanda, así como la auténtica razón de porque Hulk no ha luchado, que según los Russo era porque tenía miedo por lo que venía. Esa era la aparente trilogía especial que planeó Feige. Con respecto al Capitán América, en Infinity War  encarna el espíritu de su etapa como Nómada, para unir a nuevos héroes y ver como otros se irán. Rogers entró tarde en escena porque se pretendía que no apareciera hasta los minutos finales. El actor que encarnó a Black Panther haría en esta doble entrega su última aparición en el UCM antes de fallecer, mientras que el Doctor Strange (Cumberbatch) tiene su historia previa antes de la premisa o sinopsis de El Multiverso de la Locura. Aquí de nuevo los guionistas hicieron de las suyas  con un final ambicioso que no es sino un punto y aparte. 

                                                      

En Infinity War  Marvel reúne a Vengadores y Guardianes de la Galaxia, con Rhodey entre los primeros, y eso que Cheadle era reticente a  vestirse de Máquina de Guerra. Tampoco puede obviarse que durante la escena en que muere su personaje, Holland recibió sabios consejos de Downey para afrontar un momento tan desgarrador. Volviendo a Black Panther, ya en su película de presentación  su director explicó que los poderes de T´Challa venían de unas hierbas con forma de  corazón; aquí los actores sorprendieron a los Russo  con unos improvisados cantos típicos de Wakanda. Conviene recordar que Mackie  avisó que Falcon no moriría, que había grandes planes para este Stan y Loki ( Tom Hiddleston) en el futuro, aunque el último muera al principio, pero no es su destino definitivo. Una de las novedades es la presencia de Peter Dinklage, quien sustituye a otra víctima, Heimdall (Idris Elba). 

                                                               

Más caras nuevas incluyen a Ross Marquand, Holland, Saldana y Benedict Wong, quien ya aparecía previamente pero aquí debutaba en una aventura de los Vengadores, igual que Pom Klementieff, Mantis, presentada en Guardianes de la Galaxia 2,  o la escocesa Karen Gillan. En esta entrega, llama la atención el como se desprendía de su maquillaje de Drax Bautista, pues consistía en pasar una hora entera en una sauna, proceso por el que no pasó Gamora. Y como a toda crisis hay que echarle imaginación, su versión infantil fue interpretada por la joven y prometedora Ariana Greenblatt. Igual que Hulk,  Groot (Vin Diesel) también se muestra muy desanimado  en Infinity War , y esto es porque Gunn ya hizo que llegara a la adolescencia, por lo que esa diferencia de edad con respecto a la secuela de su franquicia  es notable. 

Terry Notary, quien hizo ya el simio en The Square, es quien interpreta al Groot adolescente en esta entrega de Vengadores. Sean Gunn, el hermano de James, hace de Rocket , Gwyneth Paltrow es Pepper Potts , Benicio del Tor hace del Coleccionista y Brolin es el Titán Loco en ambas partes, como ya se sabe. Según dijo McFeely, Thanos quiso aquí restablecer el equilibrio del universo a su manera, ya que es el personaje principal, de acuerdo con Feige. Brolin ha afirmado que su personaje tiene su corazón dentro de esa naturaleza tan homicida, como pasaba con los Corleone en El padrino. No olvidar que el actor ha interpretado dentro de Marvel a Cable, que era un tipo también armado hasta los dientes pero algo más informal y con un propósito menos espiritual, aparte de que no llevaba armadura.

                                                    

Esta entrega prometía ser  liosa y en la que iba a haber llantos en el cine, lo cual fue. Por ello no podía faltar Gurira, acostumbrada a esos adjetivos en The Walking Dead  y en Black Panther, donde compartía planos con Wright, Winston Duke y Florence Kasumba. Entre las sorpresas destacar las apariciones de William Hurt y la irlandesa Kerry Condon  como la voz de la IA de Stark. Tenemos de Spider-Man Homecoming a Jacob Batalon, que aquí hubiera estado genial que se convirtiera en villano, como le pasaba a su personaje, Ned Leeds, en los tebeos, donde se transformaba en el Duende; y también la joven Isabella Amara, que en los cómics es Sally Avril, alias Azulejo. Por supuesto no faltan ni Cobie Smulders ni Samuel L. Jackson, quienes aparecen en la escena final tras los créditos. Los aquí llamados Hijos de Thanos no son ni más ni menos que la versión UCM de la Orden Negra. 

Notary, el actor que también hizo por captura de movimientos a King Kong en Isla Calavera, secuela  de Godzilla, es un alumno aventajado del conocido Andy Serkis y uno de esos secuaces, como lo es Carrie Coon, de series como Fargo o The Leftovers, otra de las villanas cruciales, junto a Tom Vaughan-Lawlor y Michael Shaw (Corvus Glaive). Según los directores, Ebony Maw está inspirado en el infame villano Mefisto; Cráneo Rojo es el sorprendente guardián de la Gema del Alma, quien aquí ya no es Hugo Weaving, sino Marquand. Hay también pequeños papeles para gente del equipo creativo, como McFeely, o hasta directores de entregas pasadas del UCM como Kenneth Branagh, pero se quedó fuera uno que era más bien una broma privada de los Russo, David Cross, quien trabajó con estos en sus proyectos televisivos, así como Jon Favreau. 

                                                        

En esta primera parte estaba previsto que retomase su papel de villano en la tercera entrega del Capitán América Daniel Bruhl, pero se descartó. Los Russo venían de dirigir  Civil War y se trajeron consigo a los guionistas, Markus y McFeely, teniendo ya claras las influencias de los cómics en los que se iban a basar para dejarlo todo cerrado de cara a la Fase 4. No separaron la trama en dos películas, sino que dejaron que cada una tuviese una historia diferente, rodándolas consecutivamente y con gran secretismo para que no se intuyese lo que pasó en Doctor Strange, que preveía, como está siendo, un Multiverso del UCM. En Atlanta muy poca gente supo que estaba Spider-Man en plató, como tampoco que se iba a rodar en Escocia, concretamente en Edimburgo y Glasgow una producción carísima.  Y lo que sale de Nueva York  es el centro de la ciudad de Georgia. 

En pleno centro de Atlanta, en la zona de parques, es donde tiene lugar la reunión de Doctor Strange y Scott Lang, recreando Queens. Y hay escenas rodadas en un lugar tan exótico como Filipinas, por lo que hacen de Infinity War la más larga de las entregas del UCM, ya que estas eran tomas adicionales para meter los efectos visuales de ILM, responsables de Star Wars, y los de Method Studios (Jumanji: Bienvenidos a la jungla), por lo que además es la segunda película más cara de la historia, así que con lo recaudado se pagó a Evans, Hemsworth y a Johansson para que hiciera su cinta de Viuda Negra. En la música regresó Alan Silvestri, compositor de la Vengadores original  y que venía de acabar Ready Player One. Sus temas para Thanos resultan memorables por primera vez en la saga y te ponen en pie cada vez que suenan en pantalla. 

                                                          

La Marvel soñada durante una década se hizo realidad con la llegada de esta nueva película de Vengadores, ya que Infinity War es una historia vibrante y también flipada, en un sentido distinto a Black Panther  o  a Thor Ragnarok. En retrospectiva es la época dorada del estudio, donde cada aventura evento prometía tramas explosivas, pero fue además el comienzo de un triste adiós para el mismo o un épico desenlace para el UCM, lo cual hubiera sido mucho mejor, explotar con acción  que no implosionar sin ella. Entonces, detalles como la barba del Capitán América eran lo más popular y nadie lo discutía, todo iba viento en popa, se reunían otra vez los héroes más poderosos de la Tierra. Estas dos películas te recuerdan porqué te gustan en general las cintas de Marvel, por su emocionante premisa, similares a las de los mejores videojuegos del género, con su malo final, Thanos. 

Esta ocasión es también una oportunidad de ver la falta de egos que hay, siempre capitalizada por RDJ al ser la franquicia la que le recuperó para la gran pantalla. Como ya se comentó, esta antesala del final ha sido mejor recibida que el episodio IX de Star Wars por haber tomado una dirección mejor planificada en menos años que la veterana saga galáctica, también beneficiada por ser una franquicia surgida en una época de mayor globalización que la de Lucas, que por ejemplo tardó en llegar a más países que el UCM porque entonces Hollywood no tenía en cuenta el resto del mundo salvo para rodar. Ha sido así mismo la cima del género heroico, dejando a las claras que la Fase Tres ya es insuperable. Los Russo supieron guardar el secreto de su éxito hasta el final para que nadie destripase la verdadera trama, aún habiéndose estrenado antes otras  12 películas en cines. 

                                                                 

Infinity War coincidió con Deadpool 2 de la entonces Fox, de la cual ya se sabe que comparten productora y hasta actor que hace de villano, aunque más gamberra. Fue el último estreno del universo mutante rentable, ya que Endgame no tuvo rival ni de esta ni de otra franquicia heroica, cerrando  esa fase del UCM con notable. Salvó también el desastre que para el estudio fue Han Solo, la última historia individual de Star Wars estrenada en salas que frenó al Halcón Milenario por volar bajo. Por entonces lo más anticipado eran las películas de la Casa de las Ideas, ya quedaba atrás El despertar de la Fuerza, y enfrente tenía competidoras y compañeras, desde Ocean´s 8 a Los Increíbles 2  o Jurassic World 2. Esta entrega es increíble y también agotadora, haciendo malabares hábilmente  con un mareado despliegue de héroes del UCM en la lucha contra su amenaza más grave nunca vista.

Y el resultado es un éxito enorme de taquilla emocionante y  sentimentalmente resonante que, sobre todo,  cumple con sus ambiciones gigantescas. Las estrellas de Marvel se unen para darnos el último gran título de superhéroes de los últimos años, juntando a Stark y a Star-Lord en un evento multitudinario difícil de alcanzar. Y eso que terminarla resultó un tanto insatisfactorio, pues dejaba un sabor muy amargo hasta que no llegase su conclusión, lo cual te transportaba realmente a un universo donde no sabes sí querrías vivir. Para una parte del público, esta entrega era un anuncio de dos horas y media para todas las películas anteriores de Marvel, marcando todas las casillas, lo cual es su mayor defecto. Por eso unos lo ven como una emocionante mezcla de sensaciones y otros como un verdadero y épico avance de Endgame. Puedes verla 44 o 100 veces y no sabrás con que quedarte. 

                                        

Ya estamos ante un clásico moderno, con un clímax muy memorizado  y hasta con esa sensación de sí Thanos te ha matado o no tras chasquear sus dedos, pues no sabes si has estado en la mitad afortunada o en la desgraciada. El sacrificio del villano interpretado magistralmente por Brolin ha acompañado al éxito de la cinta y como todo, también ha sido malinterpretado por esa clase de fans que no distingue ficción de realidad, lo cual explica la sociedad que nos ha tocado vivir en este siglo 21. Ahora ya sólo queda revisar ambas entregas para darnos cuenta de lo muy felices que nos han hecho estos Vengadores en sus dos últimas aventuras.

Puntuación: 8