La princesa prometida (1987)
Comedia fantástica de aventuras dirigida por Rob Reiner y protagonizada por Cary Elwes, Mandy Patinkin, Chris Sarandon, Christopher Guest, Wallace Shawn, André el Gigante y Robin Wright, adaptada por William Goldman a partir de su novela homónima, contando la historia de un peón espadachín encapotado llamado Westley, acompañado por compañeros de los que se ha hecho amigo a lo largo del camino, quien debe rescatar a su verdadero amor, la princesa Buttercup, del odioso príncipe Humperdinck. La película mantiene el estilo narrativo de metaficción de la novela presentando la historia como un libro que es leído por un abuelo a su nieto enfermo.
No era mi deseo hablar de esta película ahora, pero como es un título de culto pues tenía que aparecer como fuese por aquí, siendo encima del año que nací. Es un título habitual de ver por televisión desde hace décadas, tiene una trama muy apasionante y de tanto pillarla en emisión pues ya tocaba una comedia de género fantástico.
Un abuelo lee una novela a su nieto enfermo, quien inicialmente desestima la historia.
El libro va sobre Buttercup, una joven que vive en una granja en el reino ficticio de Florín. Cuando sea que le dice al peón Westley que haga algo, él siempre cumple, diciendo " como desees". Los dos se enamoran y Westley parte para buscar su fortuna al extranjero para que puedan casarse. Sin embargo, Westley es dado por muerto después de que su barco sea atacado por el Temible Pirata Roberts.
Cinco años después, Buttercup es prometida por la fuerza con el príncipe Humperdinck de Florín. Antes de la boda, es secuestrada por tres bandidos: un pequeño siciliano llamado Vizzini, un gigante de Groenlandia llamado Fezzik y un maestro de esgrima español llamado Íñigo Montoya, quien busca venganza contra un hombre con polidactilia que asesinó a su padre. Un enmascarado de negro los persigue, como hacen el príncipe Humperdinck y sus soldados.
Sobre los Acantilados de la Locura, el hombre de negro derrota a Íñigo en un duelo de esgrima y lo noquea, ahoga a Fezzik hasta la inconsciencia y engaña a Vizzini para que beba un veneno mortífero. Huye por la fuerza con Buttercup, quien correctamente adivina que él es el Temible Pirata Roberts, lo regaña por asesinar a Westley y lo empuja por un desfiladero. Mientras cae, grita "!como desees!" Percatándose de que el hombre es Westley, Buttercup se arroja por el desfiladero tras él, reuniéndose ambos.
Mientras se abren paso por el Pantano de Fuego para evitar a Humperdinck y sus soldados, Westley explica como el " Temible Pirata Roberts" es un título heredado que asumió cuando el anterior Roberts se retiró. Habiendo encontrado a Buttercup, Westley intenta retirarse y pasarle el título a otra persona. Humperdinck captura a la pareja después de que salgan del Pantano de Fuego. Buttercup acepta regresar con Humperdinck después de que este prometa soltar a Westley. Humperdinck ordena secretamente a su sádico visir, el conde Rugen, que lleve a Westley a su cámara de tortura, el Pozo de la Desesperación. El chico ve que Rugen tiene seis dedos en su mano derecha. El visir noquea a Westley y lo deja inconsciente.
Cuando Buttercup amenaza con el suicidio si se hace la boda, Humperdinck promete falsamente encontrar a Westley por ella. Su plan real es iniciar una guerra con el país vecino, que también se llama Florín, matando a Buttercup e incriminando a ese país por ello. Humperdinck había contratado secretamente a Vizzini para matar a Buttercup, pero Westley interfirió. Mientras, Fezzik entra a formar parte del escuadrón brutal al que se ha ordenado despejar el bosque de los ladrones antes de la boda. Halla a un Íñigo borracho viviendo en el bosque, a quien desembriaga y le habla de Rugen. Íñigo dice que él y Fezzik necesitan la ayuda de Westley para asaltar el castillo.
Buttercup se da cuenta de que Humperdinck no buscó a Westley y lo llama cobarde. Encolerizado, Humperdinck aprisiona a Buttercup y tortura a Westley hasta un estado similar a la muerte. Íñigo y Fezzik, quien ha seguido los gritos de Westley por el bosque, halla su cuerpo y lo lleva hasta Max Milagroso, un curandero a quien Humperdinck despidió recientemente. El "muerto" Westley es revivido por Max, aunque está severamente debilitado.
Mientras Westley, Íñigo y Fezzik asaltan el castillo, Humperdinck siente pánico y ordena que la ceremonia nupcial en progreso sea acortada. Íñigo rastrea a Rugen, quien se burla de él por la muerte de su padre. Pese a sus heridas, Íñigo finalmente mata a Rugen. Westley localiza a Buttercup, quien cree que está casada con Humperdinck y va a suicidarse. Westley le asegura que el matrimonio es invalido porque ella nunca completó sus votos nupciales. Humperdinck los encuentra, y desafía a Westley a un duelo, pero el chico se queda voluntariamente e intimida a Humperdinck para que se rinda. Íñigo encuentra a Westley y Buttercup, y Fezzik procura cuatro caballos para su fuga. Habiendo matado a Rugen, Íñigo no está seguro de que hacer con su vida; Westley le ofrece el título de Temible Pirata Roberts. Según amanece, los reunidos Westley y Buttercup se besan apasionadamente.
El nieto enfermo pregunta ansiosamente a su abuelo que le lea la historia otra vez al día siguiente. Su abuelo responde " como desees".
Reiner se interesó por dirigir esta historia fantástica gracias a su padre, el gran Carl, que le regaló el libro por su cumpleaños. Venía de tener éxito con el estreno de Spinal Tap, y mientras preparaba el rodaje de Cuenta conmigo, habló de adaptar la novela con la gente de Paramount, que se negó, por lo cual lo intentó con los de Fox, quienes años antes pensaron hacerla con otro director, Richard Lester, el responsable de las películas de los Beatles, de aventureros espadachines o de Superman, pero Goldman no quedó muy convencido. Otros candidatos a la silla de dirección fueron François Truffaut, Robert Redford y Norman Jewison, quien pensó para el papel de Westley en Christopher Reeve. Era un proyecto grande de Hollywood pero no terminaba de arrancar. La versión definitiva fue financiada por Norman Lear, a quien Reiner conocía de trabajar para él en la serie Todo en familia.
En una entrevista de 2011, Reiner responsabilizó al jefe de Fox de la época, Barry Diller, de que la producción avanzase al venderle la historia como su propia versión de El mago de Oz. Escogió a Elwes tras verle actuar en Lady Jane, y este se encontraba rodando Maschenka en Berlín Occidental, a donde se trasladó Reiner de inmediato para contratarlo como Westley. Para el papel de Buttercup se presentaron actrices como Uma Thurman, Meg Ryan, Sean Young, Suzy Amis (futura esposa de James Cameron), Courteney Cox, Alexandra Paul y Whoopi Goldberg. Del trío de bandidos, se pensó darle el rol de Vizzini a Danny DeVito, mientras que el de Fezzik estaba pensado, acertadamente, para André el Gigante, más barato que la otra opción, Arnold Schwarzenegger. André estaba por entonces compitiendo en la lucha libre profesional y se impuso a otros grandotes como Kareem Abdul-Jabbar, Lou Ferrigno y Carel Struycken.
La inconcebible historia de esta película romántica tuvo incluso la anécdota de como rechazaron para ese papel a Liam Neeson, porque era muy bajito para hacer de gigante y el norirlandés aún no era un actor establecido. Elwes tuvo que aprender a luchar con espadas (esgrima) y a manejarse con André el Gigante, contando con la ayuda de Bob Anderson y Peter Diamond, que venían de trabajar en Star Wars. Según comentó una vez Wright, el Gigante padeció muchos dolores en plató debido a su tamaño, factor que contribuyó a su prematura muerte tiempo después. La banda sonora la compuso Mark Knopfler, de Dire Straits, por entonces bajo contrato de Warner en EEUU y Vertigo en R.U., incluyendo un tema interpretado por su amigo Willy DeVille que estuvo nominado al Óscar a la mejor canción original en la 60º edición de los premios.
La película fue un éxito modesto en taquilla, encantadora pese a su presupuesto escueto. Es un cuento de hadas postmoderno maravillosamente hecho, una mezcla inteligente y hábil de romance, comedia y peleas de espadachines que toma una historia milenaria de damisela en apuros y la convierte en algo muy fresco. Imagina coger dos clásicos de aventuras como el Robin Hood de Errol Flynn y Gunga Din y trasladarlos a los 80, el resultado sería La princesa prometida. El "como desees" dice mucho sobre el amor verdadero y la nostalgia por el ser querido, es la clave de porque es un guion tan redondo, cabe de todo, desde comedia a épica fantástica viviente. Y Wright está estupenda, poco más que añadir a lo que se ha dicho ya en otros sitios, además de que el niño no es otro que Fred Savage, antaño estrella infantil hoy más dedicado a dirigir episodios de series de televisión.
Pese a ser de Fox, esta película la distribuyó en España una compañía independiente y por eso no está en Disney+, sino en Movistar, a fecha de hoy. Hace unos años además se habló de adaptarla como obra teatral musical, pero no se llegó a hacer en condiciones. Existen incluso juegos de mesa de la película, con el asalto al castillo y todo. A falta de una nueva versión, que mejor que no la hagan ahora, Sony propuso que la hicieran para streaming con Eric Idle como el abuelo y con un príncipe Humperdinck que se pareciese a Trump, el sueño de todo yanqui votante del partido demócrata. Es inconcebible que con tan pocas películas perfectas que quedan sin rehacer fastidien esta, sería una pena y a un servidor le cabrearía mucho, tendría que matar a alguien ingeniosamente, cosa que odio.
Puntuación: 8
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